Si por algo se caracteriza este mes en Barcelona es por la celebración de Sant Jordi, patrón de Cataluña. El 23 de abril se convierte en una bonita festividad que coincide además con el Día Internacional del Libro y que se festeja con una nota romántica. Se trata de una jornada llena de historia y tradición, que llama la atención de todos los turistas.
Cuenta la leyenda que un dragón tenía atemorizados a los habitantes. Los vecinos escogían por sorteo a un habitante y lo entregaban al monstruo para que lo devorase y se saciara. Un día le tocó el turno a la hija del rey y el caballero Sant Jordi se interpuso evitando la muerte de la princesa y matando al dragón. De su sangre nace un rosal de flores rojas y de ahí la bonita costumbre de obsequiar una rosa en esta fecha.
Sant Jordi y el dragón “reaparecen” cada 23 de abril de la manera más literaria posible: regalando cultura y amor. Las calles se llenan de puestos de libros y rosas, ya que es costumbre que ese día los hombres regalen una rosa roja a las mujeres y las mujeres un libro a los hombres. A pesar de que el punto neurálgico de celebración son Las Ramblas, toda la ciudad vive esa tradición. Es una bonita costumbre que se ha ido extendiendo a otras ciudades.
Leonardo Hotels se une a esta tradición
“Desde que Leonardo Hotels se instaló por primera vez en Barcelona, hemos compartido esta bonita tradición con nuestros clientes regalando una rosa natural a todas las personas alojadas el día 23 de abril y una breve explicación del porqué de este gesto para que se sientan parte de una acontecimiento que hace que en Barcelona haya rosas en todas las esquinas de la ciudad”, explica Estel.la Farre, directora de los establecimientos de Leonardo Hotels en la Ciudad Condal.