Hay cosas con las que no se juegan y una de ellas es el bienestar, en salud y en suerte. Un bienestar que unos y otros miden de distinta manera y dependiendo de sus necesidades. Hay pocos países que pueden encerrar las dos cosas y encontrar las mejores ofertas para viajar a Tailandia y comprobarlo por uno mismo siempre es un muy buen plan.
Prepararse para hacer un viaje, por qué no en invierno, en Navidades, cuando todos están pasando frío. En realidad, se puede esperar a Papá Noel en cualquier parte, porque Papá Noel llega a todas partes con sus renos y sus trineos, sólo hace falta creer y allí irá el bueno de San Nicolás, sin que haga falta que haya chimenea.
Dicen que la mejor época para viajar a Tailandia es diciembre, cuando aún no hace mucho calor y se puede estar bien, a una temperatura agradable de 30 grados y abandonar el abrigo de España para volver a la manga corta y el bañador por unos días. Así, a lo loco.
Siempre existen ofertas de última hora que nos pueden permitir viajar y se puede entrar en CentralDeVacaciones.com para ver las distintas opciones de fechas, horarios y tarifas. Pero si no se encuentra nada conveniente para las próximas semanas, tenerlo en el horizonte para primavera tampoco es mala idea.
El caso es que Tailandia es un país de visita obligada, un país que cambia y marca un antes y un después a la persona que marcha y vuelve.
Dependiendo de hasta dónde se haya viajado antes, el choque cultural puede ser tan grande que embauca, enamora y maravilla. Se aprende la forma que tienen otras personas de vivir, tan distintas a las prisas a las que estamos acostumbrados, a los metros que parecen que nunca más van a volver a pasar un segundo después del que se ha perdido, tan diferente a los atascos sin fin que parece que hubiese un ataque zombi y que hubiese que huir a toda prisa de la ciudad.
Bangkok, o la ciudad de los ángeles por su nombre original Krung Thep, es una de las ciudades del mundo en la que más aviones aterrizan. Significativo es el número de turistas españoles y, sobre todo, aquellos que van por luna de miel, siendo un destino que se ha popularizado increíblemente en los últimos años gracias a los paquetes de cultura +playa que han sabido vender muy bien las agencias de viajes.
Tailandia es sinónimo de gastronomía, de budismo, de templos, pero también es sinónimo de superstición. Porque, efectivamente, antes de llegar a la entrada principal del Palacio Real, se ubica el famosos Mercado de Amuletos.
Sí, un mercado donde se encuentra puestos con amuletos de todo tipo, analizados con una rigurosidad infinita, a través de una lupa similar a la de los relojeros. Lo que significa cada objeto tiene que ver mucho con el material de lo que estén hechos y con lo que significó para sus dueños anteriores el poseerlo y/ o la gracia que obtuvieron con ello.
Así, se pueden encontrar pequeños budas de todo tipo así como talismanes que evocan y significan todo tipo de situaciones: salud, trabajo, amor, energía positiva, etc. Es el paraíso para todos aquellos que se consideren supersticiosos porque, de pronto, se sentirán a salvo, con fortuna, dinero, salud y amor. Casi completos en su confianza.
Y esa salud también, a su vez, la dan todas las cremas y lociones que se pueden encontrar en este país. Aparte del consabido bálsamo de tigre que cada vez se encuentra más y más en el mercado europeo, en tiendas especializadas, otras lociones no tan conocidas, con un olor fuerte parecido al réflex, se pueden encontrar fácilmente, siendo capaces de aliviar dolores musculares de cuello y / o espalda.
Además, si es fácil encontrar en una playa de España mujeres y hombres de rasgos asiáticos con ganas de dar un masaje, en Tailandia esto está a la orden del día y no es raro que, al final, se acceda a ello, no tanto en la playa y más en cabinas preparadas aposta.
Mucho se habla de masajes con final feliz, tanto que hace pensar si esto no será una leyenda urbana. Leyenda o no, lo cierto es que los tailandeses tienen una forma de dar los masajes que son capaces de quitar contracturas arrastradas en tiempo.
Estos masajes thai se unen a un sentido distinto de lo que tradicionalmente se ha entendido por un masaje. Tiene que ver con la fuerza, la energía y la capacidad de relajación y dejar fluir la carga. Tanto como en espalda como en pies, la sensación de bienestar será completa, siendo, además, bastante económico comparado con las tarifas en España. Por otro lado, además, si a esto se le suma que estás disfrutando el masaje en vacaciones, la felicidad será mayor.