Quan Zhou Wu, 28 años, historietista, ilustradora y diseñadora, tal como ella se define…
Ha publicado “Gazpacho Agridulce” y su continuación “Andaluchinas por el mundo”.
Dos libros ¿cómics? ¿novela gráfica? autobiográficos que han causado un gran impacto y muchas risas cuando se leen y se ven sus vivencias y las de su familia, una familia andaluchina, y la ha situado entre los autores estrellas de ese mundo…
Hace unos pocos meses salió “El gran libro de los niños extraordinarios”, que ella ilustra con textos de Nuria Labari
Hace unos pocos meses salió “El gran libro de los niños extraordinarios”, que ella ilustra con textos de Nuria Labari…
Ha sido un proyecto precioso, un libro interactivo ilustrado para padres e hijos, que habla de la diferencia. Y en el que, a través de la diferencia inherente en cada uno, encontramos también todas nuestras similitudes.
Este libro fue para mí un cambio de registro, porque no hay nada de comic, va para un público infantil, porque los que he hecho hasta ahora son para un público adulto, para gente de segunda generación que ya ha pasado de cierta edad, es otro registro…
Y ahora vuelve a cambiar de registro…
Televisión Española lanza en próximas fechas “Lo siguiente”, un programa de entretenimiento, con un grupo de colaboradores, entre los que figura Quan Zhou Wu con una sección “Los Siguientes”, en el que dará el punto de vista de los españoles hijos de inmigrantes…
Nació en un taxi, en Algeciras. De padre y madre chinos. Vivió muchos años en Málaga. Estudió en Madrid y se graduó en Inglaterra. Adora la siesta y odia el apio. Su madre insiste en que se case con un chino, y ella no hace mucho caso al tema…
¿Una china en Andalucía, como lo pasas?
Pues unas veces lo he pasado bien y otras veces no tan bien…
¿Cómo te tratan?
No hay término medio, hay gente que muy bien y hay gente que super mal…
He leído que en un reportaje que salías surgieron comentarios negativos
No a mí directamente, pero salimos en un reportaje de El País. Éramos segundas generaciones y salía una chica de Cabo Verde, había un chico que creo que era ecuatoriano, una chica musulmana, estaba yo, y el trasfondo de ese reportaje era que nos sentíamos españoles.Pero había gente que, como nosotros somos de otra raza, se ofendieron porque pensaban que si yo me siento española ellos eran menos españoles,como si hubiera un nivel de españolidad.Yo creo firmemente que, si somos buenas personas, rascas un poco y no somos tan distintos. Por eso el reportaje lo hicimos tan íntimo, tan contado en primera persona, porque si tú cierras los ojos y hablas conmigo un rato, te darás cuenta de que no somos tan distintos.
Para algunas personas no cumplo, digamos, el cupo de españolidad que ellas consideran el adecuado
Pero, aunque hayas nacido aquí, como eres de padres emigrantes no te consideran española, aunque tenga interés por la historia, por la cultura española y estoy perfectamente adaptada, pero para algunas personas no cumples, digamos, el cupo de españolidad que ellas consideran el adecuado.
Tú naciste en Algeciras…
En un taxi, tal como explico en el comic…
Tus padres ya vivían aquí.
Sí, pero siempre han existido comentarios racistas, eso es muy feo, también había gente muy buena que nos defendía.La identidad es bastante más compleja de lo que pensamos, no la marca un pasaporte o un DNI, si no todas tus vivencias a lo largo de tu vida y que te construyen como persona junto con tu entorno. Estoy muy en contra de que un DNI construya tu identidad y tu nacionalidad. Yo me siento muy andaluza, pero eso no me excluye de ser china ni de ser española, que es lo que me siento, pertenezco aquí y este es mi hogar.
¿Con que edad se vinieron tus padres para España?
Con treinta y pocos años y llevan en España más de treinta años.
Tú vives en Madrid…
Sí, sola…
¿Cómo te has adaptado?
Al principio lo odiaba, cuando me vine pensaba me quiero ir, pero luego llevo aquí una década y, quieras que no, montas aquí tu vida…
¿Cómo empezaste a hacer cómics?
Por casualidad, había dejado de dibujar hacía muchos años porque dibujar lo veía inútil, decía sí me voy a morir de hambre, tengo que ser práctica, si quiero vivir de algo tengo que currar, porque he estudiado diseño gráfico, y tengo un curro de diseñadora que está bien, pero con estas cosas de los choques culturales, chinos, españoles, a la gente de mi alrededor les hacía mucha gracia, una compañera me dijo un día que por qué no hacía un comic, que eso de lo autobiográfico está de super moda, y dije pues sí, y cuatro años después tengo dos novelas gráficas… (se ríe) he publicado en El País…
¿Publicaste en El País?
Estuve publicando en El País digital y colaborando en todas las radios habidas y por haber de España, porque como tengo tanto palique… creo que no me he dejado fuera ninguna. También trabajo de diseñadora en Megamedia, una productora multimedia…
Cuando viste el primer libro, Gazpacho Agridulce, expuesto ya en una librería ¿Qué pensaste?
¿Cómo he llegado hasta aquí?... No lo sé… (Risas) Esto ni en mis mejores sueños…
¿Quiénes son tus referencias en el cómic?
En el trabajo emocional que hace me gustaría parecerme a Paco Roca, fue lo primero que leí y se me saltaron las lágrimas, estaba conmovida. En el dibujo, pues no lo sé, porque soy historietista, quiero contar una historia y con lo que hago se entiende y tampoco me voy a tirar de los pelos por no ser tan buena colorista como Pepe Larraz que hace superhéroes… que tuve serias crisis con eso… (se vuelve a reír)
Yo me siento muy andaluza, pero eso no me excluye de ser china ni de ser española
Conocí a Josep María Bea, un señor con muchísimo bagaje, mucho recorrido, que acababa de reeditar ‘Las 7 muertes del gato’ y dibuja y hace unas cosas que yo decía que era increíble, y me lo encontré en un Salón del Cómic y alguien de su talla me impone, pero me dijo tú eres Quan, me ha gustado mucho lo de Andaluchinas y lo he recomendado y yo me quedé… y entonces le comenté lo del dibujo y me dijo… en resumen “No te rayes, que lo que dibujas está bien y lo que quieres comunicar a la gente le llega, no te tienes que obsesionar demasiado con eso”… Así que estoy contenta…
Quan, andaluchina por Madrid…
Dicharachera, divertida, encantadora…
Historietista, ilustradora, diseñadora…
¿Cuánto tiempo empleaste en hacer “Gazpacho agridulce” y “Andaluchinas por el mundo?
Ocho mesespara cada uno, date cuenta de que tengo que compaginar sacar adelante el libro con mi jornada laboral que es de ocho horas… Son ocho meses dedicados a hacer un libro, a saber que mis horas de ocio, las vacaciones, los fines de semana son enteramente para hacer ese libro, es muy sufrido, para mí por lo menos, porque esto no me da de comer, ni para pagarme el alquiler…
¿Sabes como están funcionando tus libros en el mercado?
Según me dicen funcionan bastante bien, pero aquí el mercado es muy limitado, para vivir de esto tienes que entrar en Estados Unidos o en Francia… en España la industria del cómic es relativamente pequeña, aunque haya bastantes tiendas es muy difícil vivir de ellos. Yo soy afortunada porque los míos han salido del mundo del cómic, conozco gente que me ha dicho que no lee comics y les ha gustado mucho… porque la gente relaciona el comic con superhéroes, tebeos para niños o manga…
¿Qué dice tu familia?
Mi madre dice que deje ya de dibujar a la familia porque está harta, que es una vergüenza, que no siga… (Se vuelve a reír)… y yo la digo que esté tranquila, pero luego hace fotos y las cuelga en las redes sociales y va diciendo que su hija es muy talentosa… en el fondo está muy contenta, cuando salgo en la radio, o en el periódico… para mis padres es unorgullo porque al final pensaban que iba a estar en un restaurante chino… mi madre estaba muy empeñada en una tienda de frutos secos, me decía ¿Por qué no dejas de trabajar de diseñadora ya… (entre risas)… y montas un frutos secos chinos y te dejas de tonterías?
¿Y el resto de la comunidad china que conozcas qué opinan?
Pues mira, al principio pensé que como soy muy irónica en las viñetas, tenía miedo de que me dijeran que era autoracista… no eso no, racista, porque autoracista me lo han llamado españoles, españoles políticamente muy correctos que no entienden de que va lo que hago y por hablar dicen paridas… a los chinos en líneas generales les ha gustado mucho, tengo bastantes lectores que son como yo nacidos en España.
¿Tu futuro como lo ves, qué te gustaría?
Si te digo la verdad no lo sé, lo mismo mi futuro está en la tienda de frutos secos (Risas) pero de verdad no lo sé, me gusta probar cosas nuevas, he descubierto una cosa que me gusta que es charlar con la gente y lo hago en la radio, he estado un año en Radio 3 y me ha gustado… no sé… estoy en un mar de dudas… pero como todo me gusta…
Y vivir aquí o en China
Creo que aquí, porque aquí tengo una libertad como mujer que allí no tendría…
Aunque aquí de vez en cuando te traten mal…
Sí, pero por ejemplo, que a mi edad aún no esté casada para mi madre es un drama muy grande, me voy a quedar solterona, para vestir santos, una cosa que yo me rio, pero allí estaría mal visto o me mirarían con pena, aunque luego hay una percepción de los chinos que está equivocada, por ejemplo que son reservados y tímidos, y para nada, te pueden decir por la calle cualquier cosa porque les da la gana, si vas por China te pueden tocar la barba sin permiso o se hacen fotos contigo… Por eso cuando aquí voy a peluquerías chinas, que soy muy fan porque son baratas y lo hacen tan bien sobre todo el alisado, me dicen cosas y se toman muchísimas confianzas… pero yo creo que me quedaré por aquí, o por lo menos por Europa porque valoro mucho mi libertad…
En el trabajo emocional que hace me gustaría parecerme a Paco Roca
Así que el futuro ya llegará, y lo ¿peor? que le puede pasar es que se tenga que casar con un chino, tal como la dice continuamente su madre… o que se tenga que poner a trabajar en un restaurante, chino naturalmente, o esa tienda de frutos secos que está flotando en el ambiente…
Confío en que no sea así, y nos siga divirtiendo con sus historias, con sus anécdotas, sus idas y venidas y con sus dibujos, para adultos o para niños, pero que siga por ese camino, aunque siga trabajando de diseñadora para tener un sueldo todos los meses…
Y es que es dura la vida del artista…
¿Verdad Quan?
No dejes nunca de reírte… y de dibujar…
Y ahora te veremos en televisión…
Ya hablaremos…