Pasear por Castellón de la Plana tiene un aliciente añadido a la visita monumental o gastronómica: sus esculturas urbanas. Más de un centenar, repartidas en ocho rutas por todos los rincones, convierten a esta capital mediterránea en un auténtico museo escultórico al aire libre. Una manera artística de dar fiel reflejo a sus personajes ilustres, oficios o tradiciones, esculpidos sobre piedra, mármol, hierro o vidrio.
Cuando visitamos por vez primera una ciudad solemos priorizar sus monumentos y su gastronomía. Pero Castellón de la Plana tiene un elemento añadido que da especial realce a los paseos urbanos. Y es que en casi cada rincón –plaza, calle, parque o rotonda– encontramos una escultura que nos hace detenernos a admirar su belleza, simbolismo o ubicación para fotografiarnos junto a ella como un bonito y original recuerdo.
Desde finales del pasado siglo XX hasta nuestros días, la ciudad se ha ido convirtiendo en un auténtico museo escultórico al aire libre. Un total de 111 obras, unas de marcado estilo costumbrista y otras cargadas de simbolismo metafórico más contemporáneas, conviven en perfecta armonía dando nombre a una guía urbana acertadamente bautizada como ‘Es…Cultura’ y agrupada en ocho rutas.
A partir de estas obras, esculpidas sobre piedra, mármol, hierro o vidrio, podemos ver reflejada en buena medida la historia de Castellón de la Plana, con sus personajes más ilustres, los oficios, las tradiciones, la religiosidad... Un perfecto acompañamiento a los paseos sin rumbo fijo, que invitan a la reflexión.
Las ocho rutas escultóricas y su ubicación
Ruta 1: En el casco antiguo, lugar inicial de peregrinaje por cualquier ciudad. Aquí podemos admirar 18 esculturas, la mayoría del artista castellonense Juan Adsuara, como ‘Desnudo de mujer’ y ‘Las tres gracias,’ en la plaza del Mercadillo; ‘La paz’, en la plaza María Agustina; ‘Aguadora’, en la Puerta del Sol; o ‘Fuente de los artistas’, en la calle Vera. También cabe destacar en esta zona el ‘Contrabajo poético, de Pere Ribera, que da la bienvenida a los espectadores del Teatro Principal.
Ruta 2: Agrupa 25 esculturas en una de las primeras ampliaciones del Castellón moderno, la Avenida Rey don Jaime. En ella destacan esculturas costumbristas, como ‘Señor leyendo a una nena’, o la conceptual ‘Historias de viandantes’, 18 tótems de hierro pintados de colores arropando ocho columnas de la antigua estación del ferrocarril, a modo de bosque. Entre ambas está el Parque Ribalta, plagado de obras entre su arboleda.
Ruta 3: En uno de los anillos urbanísticos próximos al casco antiguo. Consta de ocho esculturas, destacando las costumbristas ‘S´ha caigut la llet’ o ‘Monumento al labrador’, que contrastan con otras alegóricas como ‘La Panderola’, homenaje a la máquina de vapor, o ‘Confianza’, compuesta por dos bloques de acero simulando dos personas que apoyan sus brazos en sus respectivos hombros en señal de lealtad.
Ruta 4: Transcurre por el arrabal de San Félix, uno de los más populares de la ciudad, y barrios adyacentes hasta las inmediaciones de la ermita del Lledó, patrona de Castellón. De sus 11 esculturas, emociona ‘Virgen del Lidón’, sorprende ‘Caballos musicales’ y cautiva la originalidad de ‘Ophiusa’, que simboliza los cuatro islotes de las Columbretes, en la plaza del mismo nombre.
Ruta 5: La más alejada del centro y con menos obras, solo cuatro esculturas, que versan sobre temas como el deporte, ‘Lanzador’; el medio ambiente, ‘Reciclaje’, o la naturaleza, ‘Alegría’ y ‘Fuego’.
Ruta 6: Nos sumerge en el distrito marítimo del Grau, balcón por el que Castellón se asoma al Mediterráneo. La mayoría de sus 16 esculturas están dedicadas a las gentes del mar –‘Peixatera’, ‘Mariner’, ‘Remendadora’, ‘Despidiendo al marinero’– aunque los amantes del arte abstracto disfrutarán admirando ‘El Grau ama el mar’.
Ruta 7: Propone descubrir el arte que arropa las rotondas de la ciudad. Es la que acapara mayor número de creaciones: 22 esculturas. Entre ellas destacan: ‘Mensajera de la Paz’, en la Avenida del Mar; ‘Puerta de la ciudad’, en la carretera de Borriol; o ‘Las Cañas’, obra del conocido artista italiano Pino Castagna, elaborada con acero y cristal de Murano en tres colores y que realza en su conjunto una altura de 10 metros.
Ruta 8: Agrupa en siete esculturas los bustos de sus hijos ilustres o personalidades vinculadas a Castellón, como ‘Mosen Prades’, Prior de la Basílica del Lledó; el compositor y guitarrista ‘Francisco Tárrega’; la reina consorte ‘Na Violant’, esposa de Jaime I; o el ‘Pintor Castell, genio costumbrista del siglo XIX.