Esta ruta turística muestra los escenarios en los que se forjó, Benito Pérez Galdós, su ciudad natal, uno de los nombres de la Literatura Universal.
Las Palmas de Gran Canaria vio nacer a Benito Pérez Galdós en 1843. En sus calles creció y desarrolló un talento que le convirtió, años después, en un referente literario. Este nuevo itinerario propone un recorrido por los espacios galdosianos, en pleno casco histórico de Las Palmas de Gran Canaria, su ciudad. Una nueva manera de recorrer la capital grancanaria que amplía su oferta cultural.
La propuesta posibilita, tanto a locales como a turistas, descubrir el vínculo entre el escritor y la ciudad que le vio nacer. "Las Palmas de Gran Canaria se merece ser conocida como la ciudad de Galdós, igual que Lisboa es la ciudad de Pessoa, Praga es la ciudad de Kafka y Dublín, la de Joyce”, según el concejal de Turismo, Pedro Quevedo.
Itinerario
El recorrido transita por los barrios de Triana y Vegueta. La Casa-Museo Pérez Galdós -la casa natal y familiar del escritor-, en la calle Cano, invita al paseante a conocer otros enclaves emblemáticos de la ciudad vieja. Como la Iglesia de San Francisco, donde fue bautizado Benito Pérez Galdós: un templo que fue incendiado por el corsario Van der Does durante su asalto a la urbe en 1599, y que también ha sido cuartel militar y conservatorio de música.
La siguiente parada es el Gabinete Literario, fundado en el Siglo XIX. Galdós asistió allí a su Academia de Dibujo, y frecuentó sus conciertos y sesiones artísticas. Hoy, en su Salón Rojo, luce un retrato del Galdós Bachiller, y el último que se conoce de su figura, firmado por Juan Carlo.
Luego se transita por la Catedral: el escritor vio construir su torre sur, para, en 1866, evocarla con la creación de su Prototipo, singular personaje romántico-literario, según se explica en el folleto turístico, que el visitante puede encontrar en los diferentes puntos de información de la ciudad.
El itinerario atraviesa la Plaza de Santa Ana para detenerse en las Casas Consistoriales, que hoy cuentan con un busto de Galdós junto a su emblemático Salón Dorado. En este edificio se aprobó por aclamación una propuesta para nominar al literato como Premio Nobel de Literatura.
Otra parada es la de El Museo Canario, donde se encuentra el mobiliario del dormitorio en el que falleció el escritor canario. En su libro de firmas el propio Galdós llegó a escribir, en 1894, “¡Qué hermoso es El Museo Canario!”.
El paseo por la Ciudad de Galdós se acerca también al Palacio de Justicia de Canarias y al histórico Convento de San Agustín, donde Galdós terminó su Bachillerato en 1862 y llevó a cabo una intensa labor periodística; al Teatro Pérez Galdós (curiosamente, el joven escritor llegó a criticar su construcción tan cerca del mar. Luego, se cambiaría el nombre de Tirso de Molina al actual); o la Calle Mayor de Triana, lugar favorito del literato para sus correrías infantiles.
También se muestra notros enclaves como la Ermita de San Telmo, el parque y el antiguo Muelle de Las Palmas, desde donde Galdós partió en su travesía hacia la Península (aquí estuvo hasta los años 60 el monumento que le dedicó Vitorio Macho). También a la Calle Pérez Galdós, así bautizada en 1883, en honor a este ilustre “hijo de Las Palmas, y gloria de la literatura patria”. Finalmente, el itinerario incluye el Rectorado de la Universidad de Las Palmas y en el Instituto Pérez Galdós.