Amasar las trenzas navideñas, encender una vela en la corona cada domingo de Adviento, asistir a la misa de Navidad, esperar los regalos de San Nicolás (y también los del Niño Jesús), guardar una escama de carpa en la cartera, tirar un zapato… son muchas las costumbres que resultarán familiares una vez se haya visitado Chequia en este periodo festivo. Conectar con el espíritu navideño checo es algo muy sencillo y casi automático, basta dejarse imbuir por el ambiente de los mercadillos, el lugar favorito de las personas locales para encontrarse con los amigos, tomar un vino caliente o escuchar los coros de voces infantiles entonando los villancicos populares.
La magia de la Navidad se instala en el país a finales de noviembre y se suele prolongar hasta el 6 de enero en muchos lugares. Durante ese periodo, las luces y motivos navideños ocupan los espacios públicos, los mercadillos se colocan en las principales plazas y se crea un programa cultural acorde a las fechas donde no faltan espectáculos clásicos como El Cascanueces. Cada región, ciudad o pequeña aldea brinda una experiencia apetecible y con sutiles diferencias entre sí.
Os proponemos disfrutar del Adviento y la Navidad en la República Checa realizando un recorrido circular por las ciudades de Karlovy Vary, Pilsen, České Budějovice, Český Krumlov, Olomouc, Brno y Liberec.
Variedad de mercadillos en Praga
La buena conexión de la capital checa con diversas ciudades españolas y su sobresaliente monumentalidad la convierten en la gran favorita del viajero español durante la época de Adviento. Y razones no faltan, porque se podrían pasar semanas visitando puestos en los mercadillos sin dejar de sorprenderse. El principal es el Mercadillo de la plaza Staroměstské náměstí (30.11-6.1.25), donde además de sus cientos de puestos, también luce un enorme árbol, el más grande del país, que se ilumina el primer fin de semana de diciembre. El espacio permanece animado durante todo el día, siempre hay alguien curioseando entre la artesanía local, calentándose con un vino (svařák) o un licor de miel, o dejándose tentar por los puestos de embutidos o salchichas (párky y klobásy).
Pero este no es el único mercadillo que merece la pena en Praga, porque a un corto paseo se sitúan otros como los de la plaza Václavské náměstí (30.11-6.1.25), situado a los pies del Museo Nacional, o el de la plaza náměstí Republiky (25.11-24.12), junto a la bellísima Casa Municipal. Un poco más alejados del centro, pero con el mismo encanto, están el Mercadillo del Castillo o de Pražský hrad (23.11-6.1.25), situado junto a la Catedral de San Vito, y los de la plaza Tylovo náměstí (26.11-24.12), plaza náměstí Míru (20.11-24.12), Smíchov – zona peatonal Anděl (24.11-24.12) y plaza Jiřího z Poděbrad (en Vinohrady, 1.12-22.12).
Quienes visiten Praga también tendrán la oportunidad de disfrutar de otras actividades perfectas para pequeños y mayores, como el patinaje sobre hielo, seguir al farolero de Praga mientras enciende las farolas de gas, y asistir a conciertos en la Capilla del Klementinum, en el Teatro Nacional, en alguna iglesia, o incluso en el propio Castillo.
La Casa de la Navidad de Karlovy Vary
A menos de dos horas de Praga, la ciudad de Karlovy Vary exhibe en invierno una estampa tan idílica que es fácil entender por qué Goethe, Beethoven, el zar Pedro el Grande o Paganini se quedaron prendados de ella. Los habituales paseos por sus calles para admirar su elegante arquitectura o sus columnatas, que algunas parecen tejidas como un encaje, se combinan en la época de Adviento con la visita a los mercadillos navideños (30.11-26.12). Además de dejarse imbuir por el espíritu de las fiestas mediante la preciosa decoración de los hoteles, los restaurantes y las tiendas, también se puede conocer la Casa de la Navidad. Este espacio permanece abierto durante todo el año, pero su atmósfera en noviembre y diciembre desprende algo especial (horario: de martes a domingo, de 10 a 20 horas). Un belén y un árbol de ocho metros reciben al visitante antes de sumergirse en un mundo de sueños a través de su Museo de los Ositos, el Museo de la Navidad, la Ciudad Mágica, su café o la tienda de recuerdos.
Otras ciudades cercanas como Loket o Cheb también sorprenden con curiosos desfiles de diablos o mercados en castillos.
Los manjares de Pilsen
Desde Karlovy Vary, se puede conducir hasta Pilsen para descubrir cómo vive esta ciudad la época de Adviento. Del 22 de noviembre al 23 de diciembre, la plaza náměstí Republiky volverá a lucir una preciosa ambientación navideña en la que no faltarán puestos de artesanía con demostraciones en directo y quioscos con manjares regionales, de dulces propios de la época y de vino caliente. Todo el conjunto, con el árbol iluminado, el belén viviente y los villancicos sonando por aquí y por allá convierten este espacio en el epicentro de la Navidad en Pilsen, pero también se puede sentir ese espíritu en lugares como la Catedral gótica de San Bartolomé, donde se celebran los conciertos de Adviento. Desde su torre, además, se puede admirar la iluminación de toda la ciudad.
Desde la oficina de turismo organizan visitas para dar a conocer las costumbres locales en estas fechas y cómo se desarrolla la Navidad en Pilsen. Todos estos planes son compatibles con otras propuestas culturales o un recorrido por las factorías de cerveza.
La magia de České Budějovice y Český Krumlov
La siguiente parada de este circuito navideño es la capital de Bohemia del Sur, České Budějovice, donde la plaza náměstí Přemysla Otakara funciona como epicentro de la fiesta y de las actividades principales. Como en las ciudades anteriores, su mercadillo tentará con miles de detalles y regalitos a los viandantes (22.11-6.1.25), pero en este lugar el programa musical y la puesta en escena de los espectáculos es especialmente destacada. No faltarán grupos folclóricos que animen la plaza con su música y sus bailes, ni villancicos tradicionales que alegren el alma mientras los visitantes se calientan con todo tipo de ponches y licores de miel. Los niños disfrutarán de la pista de patinaje, que estará habilitada del 25 de noviembre al 31 de diciembre en el centro de la plaza, y de la noria navideña que brindará las mejores vistas del entorno.
A pocos minutos de České Budějovice se sitúa la bonita población de Český Krumlov, cuya estampa invernal con iluminación navideña es lo más parecido que podamos imaginar a un cuento de hadas. Su mercadillo (29.11-1.1.25), los desfiles de ángeles, el correo del Niño Jesús, los coros de voces infantiles o la costumbre de alimentar el día de Navidad con pasteles a los osos, que viven en el foso del palacio, son tradiciones que hay que conocer.
Los ponches navideños de Olomouc
La ruta circular navideña continúa en Olomouc, una de las ciudades más monumentales de Chequia y también de las más animadas debido a su gran comunidad universitaria. Del 22 de noviembre al 31 de diciembre, la alegría se instala en los mercadillos y las plazas para brindar una experiencia inolvidable. Incluso cuenta con espacios tan originales como el “Pueblo del ponche”, en la plaza Horní náměstí, donde se ofertan decenas de variedades de esta bebida tan navideña. Hasta el 24 de diciembre, durante un mes, se organiza un amplio programa musical y de artes escénicas, en el que cada día tiene lugar un concierto o una obra teatral.
Subir a la torre del Ayuntamiento para admirar una panorámica de la ciudad, visitar los belenes situados en todas las iglesias, observar la iluminación de la Columna de la Peste (Patrimonio de la Humanidad por la Unesco), subir a una noria navideña de 15 metros de altura o patinar en una pista de hielo son propuestas que no se pueden rechazar en Olomouc
Brno, Capital Europea de la Navidad
Brno ostenta este año el título de “Capital Europea de la Navidad” por lo que las actividades se multiplican aún más que en otras ediciones. Este galardón reconoce no sólo el impacto social y económico de la Navidad en la ciudad sino el ambiente navideño y la renovación del concepto de los mercadillos sin perder la esencia tradicional. Con el encendido del árbol en la plaza náměstí Svobody el día 22 de noviembre comenzará el período oficial de mercadillos (hasta el 23 de diciembre) y se recordará que se cumplen cien años desde que se colocara allí un abeto por primera vez.
Los mercadillos de la capital de Moravia del Sur, con sus decenas de puestos rebosantes de manjares navideños, ponches y platos de matanza, se distribuyen por cuatro plazas y un patio, aunque cada uno con su propia temática y filosofía.
En la plaza náměstí Svobody destacará su completo programa musical, mientras que la plaza Dominikánské náměstí ha sido pensada para familias, con un belén y un pueblecito con más de cien figuras de madera, un tranvía navideño y puestos de refrescos. El patio del Ayuntamiento se centra en la Navidad Gourmet, con quioscos a rebosar de delicias gastronómicas, y las plazas Moravské náměstí y Zelný trh ofrecen propuestas para todos los públicos en cuanto a música, juegos, noria, pista de patinaje… Se puede consultar todo su programa en la web de Brno en Navidad.
Los adornos de cristal de Liberec
Terminamos este viaje en Liberec, en un lugar tan especial que casi podría considerarse la cuna checa de la Navidad. Del 29 de noviembre al 23 de diciembre, la capital del denominado Valle del Cristal se engalana para seducir a visitantes y locales con un bonito mercadillo en la plaza Dr. Edvard Beneš (frente al Ayuntamiento) donde no faltarán delicias gastronómicas ni artesanía local. Sin embargo, lo idóneo cuando se visita Liberec es ampliar la estancia para conocer dos lugares donde la Navidad se instala todo el año: el “Museo del Cristal y la Bisutería” de Jablonec nad Nisou, con una exposición integrada por miles de adornos navideños, y el pueblo de Poniklá, donde se elaboran delicados adornos realizados con un finísimo cristal de Bohemia. El taller de Rautis lleva siglos elaborando ornamentos navideños con perlas de cristal que llegan a todo el mundo. Sin duda, este puede ser un recuerdo que permanezca en los hogares de los viajeros durante toda la vida.