¿Tiene ganas de descubrir un destino ecológico para recargar pilas lejos del ajetreo cotidiano?
¡El lugar es Alençon, en Normandía! A dos horas y media de París, esta pequeña ciudad de 30.000 habitantes, clasificada como Site Patrimonial Remarquable, puede sorprenderle.
Esta pequeña ciudad de 30.000 habitantes, está clasificada como Site Patrimonial Remarquable
Para una estancia de 2 días, le presentamos un resumen de lo que no puede perderse en la antigua Ciudad de los Duques
PRIMER DÍA
Mañana: pasee por el mercado del centro de la ciudad, una visita obligada para quienes viven en Alençon los jueves y sábados por la mañana. Encontrará todo lo necesario para llenar una sabrosa cesta repleta de productos locales: bebidas "made in Normandie" (poiré, sidra, cerveza), panes frescos, quesos, frutas y verduras, carnes, patés, mieles y mucho más.
¡Para degustar in situ o para llevar en el equipaje de regreso!
El mercado está situado a los pies de la basílica de Notre Dame, cuya flamante portada gótica es una de las más bellas de Normandía.
No olvide descargar la aplicación LEGENDR o recoger su mapa de la ciudad (disponible en francés, inglés y alemán por 1 euro) en la Oficina de Turismo, situada en la Maison d'Ozé, en la place de la Magdeleine, para descubrir la fascinante historia de esta ciudad que floreció durante la Edad Media.
Recorra la Grande Rue en dirección al barrio de Saint-Léonard, donde encontrará algunas de las casas más antiguas de Alençon: casas con entramado de madera, patios secretos adoquinados, el castillo de los Duques... tesoros que hoy se pueden encontrar entre los restaurantes y boutiques del barrio.
Ponga rumbo a Saint-Céneri-le-Gérei, uno de los pueblos más bellos de Francia
Mediodía: ¡caminar abre el apetito! Haga una pausa gastronómica en "Le Bistrot" (Gault y Millau), un pequeño restaurante decorado al estilo de un bouchon lionés, o en "San Remo", que sirve pizzas crujientes.
Tarde: visite el Museo de Bellas Artes y Encaje, uno de los museos imprescindibles de Alençon, que le mostrará sus excepcionales colecciones. La primera sección está dedicada a la historia del encaje de punto de Alençon. Este savoir-faire, único en el mundo, es Patrimonio Mundial de la UNESCO, y por una buena razón: ¡se necesitan 15 horas de trabajo para fabricar el equivalente a 1 cm2! No se pierda el velo de novia de 3,50 m, una pieza única cuya confección llevó casi 500.000 horas de trabajo.
No olvide pasar por la casa natal de Santa Teresa, la santa más famosa del mundo. Sus padres, Louis y Zélie, se convirtieron en la única pareja canonizada en 2015. Siga sus pasos por la casa familiar, rica en secretos e historias, para descubrir la intimidad de esta familia corriente con un destino extraordinario.
Noche: el día llega a su final y hay que instalarse y estar cómodo en un hotel del centro de la ciudad (Ibis, Hôtel des Ducs), en un bed and breakfast (les Deux Marguerite) o incluso en una casa de vacaciones amueblada (les 3 petites pommes). Acto seguido, ¡deléitese con la cocina de nuestros jóvenes chefs! Ya sea en el restaurante La Suite, que cuenta con una estrella Michelin y que ofrece una cocina moderna y delicada; o en L’évidence o Chez Fano, con su cocina creativa y gourmet, hay algo para todos los gustos.
SEGUNDO DÍA
Mañana: Al día siguiente, ponga rumbo a Saint-Céneri-le-Gérei, uno de los pueblos más bellos de Francia, conservado en un entorno natural en el corazón de los "Alpes Mancelles". Pasee por las callejuelas de este pequeño pueblo, lleno de secretos e historias. En la posada de las hermanas Moisy, no se pierda la "Salle des décapités" (Sala de las decapitaciones), llamada así por los pintores parisinos del siglo XIX que solían alojarse aquí todos los veranos. Este espacio único, descubrirá 66 perfiles de pintores, residentes y viajeros pintados como una sombra china. Más adelante, en la capilla dedicada a SaintCéneri, fundador del pueblo en el siglo VII, verá una estatua del Santo, cuya leyenda cuenta que las jóvenes que buscaban marido le clavaban una aguja en los pies para que les concediera sus deseos.
Para los curiosos y los amantes del arte, no dude en abrir de par en par las puertas de los numerosos talleres de artistas, como el de Amélie Romet, que le dará una calurosa bienvenida. Artista de corazón, pinta paisajes, naturaleza y animales.
Mediodía: disfrute de un vaso de sidra local y de la cocina de temporada en "La Maison du Gasseau", a pocos kilómetros del pueblo. En este maravilloso espacio, podrá disfrutar de la terraza rodeado de naturaleza. Y si viene con niños, ¡el curso de arborismo está justo al lado!
Tarde: cálcese las zapatillas de senderismo y, según su nivel, recorra los senderos locales como el "Trotté par la Corniche", un bucle de 5 km que le ofrece las mejores vistas del pueblo de Saint-Céneri. Vaya después a los Jardines de la Mansonière, donde una pareja de entusiastas le ofrece 15 jardines amurallados, desde rosaledas a jardines asiáticos y aromáticos. Una plan muy especial para cerrar con broche de oro este maravilloso programa de 2 días.
¿Cómo llegar a Alençon?
En tren (2 horas desde París con transbordo en la estación de Le Mans), en avión o en coche (2 horas y media desde los aeropuertos de París), o en bicicleta (etapa de la Véloscénie, una ruta ciclista de 450 km que une París con el Monte Saint-Michel).