Japón dio comienzo al año 2024 de una manera trágica. Un potente terremoto de magnitud 7,6 ha sacudido la isla nipona.
Este seísmo ha golpeado la prefectura de Ishikawa, en el litoral occidental del centro de Japón, dejando más de 46.000 evacuados y al menos 30 muertos.
El seísmo, que ha tenido su epicentro en la península de Noto, obligó a activar una alerta que ha estado vigente unas 18 horas por posibles subidas de la marea en la costa occidental de las islas de Honshu y Hokkaido y el norte de la isla de Kyushu.
Concretamente, Ishikawa ha llegado a encontrarse bajo una "alerta de envergadura por tsunami", la primera de esta naturaleza desde el devastador terremoto de 2011. Sin embargo, ha sido desactivada en la madrugada de este martes.
El terremoto se ha producido pasadas las 16 horas a unos 10 kilómetros de profundidad y con una intensidad de 7 en la escala japonesa, que se centra en la capacidad destructiva de los temblores. La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) notificó 40 minutos después que se había producido una fuerte réplica del temblor en Ishikawa y ha advertido que durante la próxima semana es muy probable que se produzcan más temblores que alcancen también el nivel 7.
Tras lo acontecido en Japón, y para tranquilidad de los turistas, desde Boeki Up, receptivo japonés fundado por españoles residentes en el país del sol naciente, que ofrece solo viajes a medida en castellano, ha informado que ‘tras el terremoto acontecido en Japón en la Península de Noto (prefectura de Ishikawa), que sigue operando con total normalidad.’
‘Afortunadamente, el episodio sísmico ha afectado a una zona muy concreta del país y la alerta por tsunami, inicialmente emitida, ha sido desactivada’