Los rascacielos del horizonte de la capital qatarí se han convertido en uno de sus paisajes más reconocidos.
De entre los incontables atractivos que se esconden en la pequeña península de Qatar en el golfo Arábigo, su skyline es sin duda uno de los más reconocibles. La silueta de los modernos edificios crea postales de ensueño, pero ¿desde dónde se pueden observar las mejores vistas? Estos son algunos de los puntos clave para deleitarse con la mejor perspectiva y, por supuesto, conseguir las mejores fotos:
La Corniche
Una de las imágenes por excelencia de los rascacielos qatarís se observa desde el paseo de la Corniche, que recorre a lo largo de siete kilómetros la bahía hasta West Bay, el barrio repleto de rascacielos de Qatar. En este precioso paseo, con las aguas del golfo y los edificios más emblemáticos de Doha de fondo, los viajeros pueden identificar algunas de sus construcciones más famosas: Doha Tower, de Jean Nouvel; Tornado Tower, Palm Tower o el hotel Sheraton, el primero en erigirse en la capital, son solo algunos de los más conocidos. Junto a ellos es habitual ver los dhows, embarcaciones tradicionales de madera, completando una postal de contrastes única. Por la noche, las luces de los rascacielos iluminan el cielo qatarí para mostrar la cara más moderna de Doha.
Museo de Arte Islámico
Siguiendo el camino de la Corniche se llega a uno de los puntos clave en cualquier visita a Doha, su Museo de Arte Islámico. Además de su impresionante colección artística o excelente restaurante, IDAM, es también uno de los lugares desde conseguir la foto más buscada en Doha. En el lateral del muso diseñado por I. M. Pei se encuentran sus característicos arcos, que enmarcan a la perfección las vistas de los rascacielos de West Bay.
Desde el parque aledaño al que da nombre el propio museo, el MIA Park, los viajeros también se pueden deleitar con otra de las grandes perspectivas de los rascacielos qatarís. Acompañados, además, por la escultura ‘7’, firmada por Richard Serra, que alcanza los 25 metros de altura junto al Museo de Arte Islámico.
Las vistas desde las alturas
Muchas de las mejores panorámicas de los grandes edificios de Doha se encuentran, precisamente, en las alturas. Son numerosos los restaurantes qatarís que maridan sus platos con las mejores vistas de la ciudad desde terrazas y rooftops en los que disfrutar de las temperaturas cálidas todo el año. Restaurantes como Nobu, Jiwan −en el Museo Nacional de Qatar−, Sora o Vertigo son algunos de los locales que llevar anotados en la lista de sitios indispensables.
Para la experiencia más exclusiva, el helipuerto del hotel JW Marriot cuenta con una de las mejores vistas de la ciudad. A la altura de las agujas de los grandes rascacielos de Doha, el hotel ofrece cenas privadas en una experiencia verdaderamente única, con Doha a los pies.