La Costa Brava regala a locales y visitantes un entorno natural único para vivir experiencias espectaculares en el agua. Sus más 200 kilómetros de costa dan para muchísimo más que relajarse en la arena tomando el sol y admirando el Mediterráneo.
Desde paseos en kayak hasta submarinismo pasando por bautizos de vela o kitesurf; las actividades acuáticas en la provincia son las más divertidas y, lo mejor, es que las hay para todos los niveles y gustos. Así, cada quien puede encontrar la actividad más adecuada para poder disfrutar de un día de verano inolvidable.
Para los amantes del fondo marino
Desde Costa Brava Sub aconsejan a la hora de elegir la mejor de sus inmersiones. En función del nivel de los participantes hay propuestas para bucear entre barcos hundidos, en túneles o paredes con desniveles, cuevas y pasillos estrechos, por zonas con grandes aperturas, espacios protegidos; incluso, salidas de iniciación y bautizos de submarinismo. Siempre en lugares increíbles y que son polo de atracción para amantes del fondo marino de todo el mundo. Quien prefiera el snorkel, Medaqua propone descubrir la Reserva Marina de las Islas Medas, considerada la mejor de toda Europa. En esta actividad grupal podrán apreciarse las grandes praderas de posidonia, que hacen de este sitio, el escondite perfecto para cientos de especies y sus crías, las cuales pueden observarse fácilmente desde la superficie, a poca profundidad.
Aventuras en un kayak
Esta pequeña embarcación es el medio de transporte idóneo para conocer la Costa Brava, ya que permite llegar hasta acantilados, cuevas marítimas, pequeñas calas inaccesibles desde tierra y lugares escondidos de una belleza extraordinaria inimaginable. Kayaking Costa Brava ofrece excursiones guiadas desde cala Montgó, ideal para descubrir la costa del Macizo del Montgrí, un litoral caracterizado por sus imponentes acantilados a penas rotos por pequeñas calas, grietas, túneles y cuevas de gran belleza. Así como desde Portlligat para descubrir el Parque Natural del Cap de Creus, Tamariu o Castell.
Otra de las ventajas del kayak es que, aparte de una experiencia singular, también representa la puerta de acceso a un abanico de propuestas de turismo activo, como una cata de vinos en una cala, una degustación de productos de proximidad al llegar a la playa o el descubrimiento de la fauna y flora del paisaje mediterráneo.
Windsurf: para los que prefieren desafiar las olas
El windsurf permite vivir la experiencia de navegar sobre una tabla, poniendo el viento a nuestro favor y experimentando cierta sensación de libertad. Hay diferentes lugares que cuentan con los servicios necesarios para practicar este exigente deporte náutico: el camping La Ballena Alegre en Sant Pere Pescador, el Club Náutico L’Estartit, la Estación Náutica de L’Estartit-Illes Medes o la Estación Náutica Roses-Cap de Creus. Quienes necesiten aún más adrenalina en el mismo camping La Ballena Alegre proponen cursos de iniciación al kitesurf, una experiencia única de velocidad y saltos sobre las olas. Además, cuentan con puntos de alquiler de material y profesionales especializados en esta actividad.
Por si fuera poco, otra opción igual de divertida, pero con un poco más de estabilidad, es el kayak de surf o surfski, un tipo de kayak abierto, estrecho, ligero y muy estable —que generalmente lleva un timón debajo del casco controlado a través del reposa pies— para poder tener la sensación de libertad al palear de forma segura y divertida. Sk Kayak, en Llançà, ofrece esta singular experiencia por el cabo de Creus.