Descubre una isla donde hay mucho por vivir y descubrir a través de un recorrido diferente en el que sus espectaculares playas y su resplandeciente sol sean el complemento perfecto de un viaje lleno de sorpresas en el interior de Gran Canaria. La isla es pura naturaleza. Es mar, es playa, es montaña, es gastronomía, es cultura, es historia y el carácter de su gente es tan amable como su clima y patrimonio natural.
Al amplio repertorio de playas de arena dorada y coquetas calas para todos los públicos se añade la belleza de sus zonas más montañosas
Gran Canaria es una isla muy diversa y si viajas a través de ella verás que, en muy corto espacio de tiempo, paisajes y microclimas diferentes se abren ante tus ojos. En un solo día puedes viajar a lugares de bosques europeos de hoja perenne y después plantarte en un oasis de arena dorada como el de la Reserva Natural Especial de las Dunas de Maspalomas. Es un lugar verdaderamente único lleno de belleza natural y una cultura que enamora. Los amantes del descanso tranquilo en la playa, así como los fanáticos de las vacaciones activas, encuentran aquí el lugar con el que estaban soñando.
La isla redonda es conocida por ser un «continente en miniatura», con temperaturas perfectas durante todo el año para disfrutar de unas vacaciones o escapadas repletas de planes al aire libre. Al amplio repertorio de playas de arena dorada y coquetas calas para todos los públicos se añade la belleza de sus zonas más montañosas, las más verdes, salvajes y desconocidas. Te proponemos conocerla de otra forma, recorriendo sus encantadores pueblos de interior, donde podrás empaparte de toda la esencia de esta tierra volcánica y de la singularidad de sus tradiciones.
Entre las propuestas no podía faltar una visita a Tejeda, incluido en el selecto club de Los Pueblos Más Bonitos de España, y no es para menos, es un lugar mágico entre roques sagrados y dulces divinos con la almendra como protagonista. El lugar perfecto para adentrarse en la verdadera raíz y la esencia profunda de esta tierra, con el Roque Nublo como anfitrión, símbolo de los grancanarios. Un coqueto pueblo donde la arqueología, la naturaleza, la arquitectura, la cultura, el arte y la gastronomía se dan la mano para darte la más cálida bienvenida.
Gran Canaria es un cruce de caminos con más de cinco siglos de historia. Las empedradas calles de muchos de sus pueblos y ciudades hablan de su significado como lugar de paso para gente de mil procedencias distintas. Es una extraña mezcla de aromas, colores y culturas en medio de océano Atlántico. En sus límites es fácil tropezar con una enorme iglesia neogótica en medio de un mar de plataneras, toparse con los restos de una ciudad prehispánica a dos saltos del mercado municipal y recordar el viaje del navegante genovés hacia el Nuevo Mundo al adentrarte en la Casa de Colón del barrio histórico de Vegueta.
La isla de Gran Canaria es, además de un lugar de descanso y desconexión perfecto, un lugar donde recargarse de energía y sentirse en contacto con la naturaleza practicando todo tipo de turismo activo. Cerca de la mitad del territorio de esta isla es Reserva de la Biosfera por el alto valor de los ecosistemas que en ella viven, todo un lujo para los sentidos dejarse impresionar por la grandiosidad de los paisajes que regala a cada paso. Es también Patrimonio de la Humanidad, otro reconocimiento de la Unesco a una extensa zona donde se conservan vestigios de civilizaciones pasadas que vivían alejadas del resto del mundo. En esta isla se abre un túnel al pasado con solo asomarte al Paisaje Cultural de Risco Caído y las Montañas Sagradas Gran Canaria, desde cualquiera de sus puntos serás testigo del valor arqueológico, humano y paisajístico de este espacio considerado en estos tres ámbitos uno de los más importantes a nivel mundial.
Gran Canaria es un cruce de caminos con más de cinco siglos de historia
Si lo que estás buscando es una aventura inolvidable en un destino increíble, ya has dado con el lugar perfecto para realizar desde emocionantes caminatas relajantes hasta la oportunidad de explorar la diversidad de aves endémicas de Gran Canaria. O quizá prefieras actividades más extremas como paracaidismo, apnea, escalada, rápel o barranquismo, o quizás te decantantes por propuestas de multiaventura que no dejan indiferente a nadie. Los acantilados de Mogán son el escenario perfecto para otra de estas actividades, el coastering, un recorrido anfibio que alterna mar y montaña en el que se pueden probar técnicas como la vía ferrata marina, los puentes colgantes o los saltos al mar. Para aprovechar al máximo toda la emoción y la adrenalina de este tipo de experiencias, en la isla contarás con empresas especializadas que te guiarán en todo momento. Junto a equipos que conocen palmo a palmo el terreno solo tendrás que pensar en disfrutar de los grandes contrastes paisajísticos que abarcan desde escarpados acantilados hasta cañones que ofrecen una vista fantástica del hermoso paisaje grancanario.
Si quieres conocer otro de los grandes tesoros de la geología de Gran Canaria no dejes pasar la oportunidad de acércate a un espacio no muy conocido porque su camino se mantiene fuera del alcance del visitante de a pie. Te hablamos del Barranco de Las Vacas, un cañón geológico de cenizas volcánicas producto del impacto del agua que bajaba por este barranco durante miles de años. Este punto de gran belleza está ubicado en el municipio de Agüimes, para llegar hasta este rincón escondido hay que seguir el sendero que recorre el antiguo camino real de Temisas para adentrarse en este cañón que, en versión mini, recuerda al Gran Cañón de Estados Unidos.
Y desde este paraje singular puedes pasar a conocer otro de los secretos que mejor guarda Gran Canaria: el que nace de la combinación de la cultura del vino y el carácter poliédrico de esta isla. Como resultado puedes saborear su paisaje embotellado y sumergirte en las costumbres y tradiciones que emanan de productos elaborados por hombres y mujeres que aún conservan los métodos ancestrales de sus antepasados. Descubre el legado de generaciones pasadas a través de una experiencia única en la Ruta del Vino de Gran Canaria. Embárcate en un extraordinario viaje enoturístico que te llevará a través de parajes exuberantes en tierras volcánicas y modos de vida auténticos en el corazón mismo de la isla. Explora sus bodegas, viñedos y cultivos que tienen la isla una versión diferente. A través de sus originales vinos y una gastronomía que está en un momento de explosión la experiencia sensorial está garantizada.
La isla de Gran Canaria es un lugar de descanso y desconexión perfecto, un lugar donde recargarse de energía y sentirse en contacto con la naturaleza
Despierta tus sentidos saboreando las creaciones de los fogones de Gran Canaria, una isla de sabores singulares, con una cocina muy pegada al territorio que está actualmente liderada por un buen número de jóvenes cocineros que combinan a la perfección el respeto por el recetario más tradicional con las técnicas más vanguardistas. Busca el arte culinario y la creatividad de nuestros chefs recorriéndola paso a paso, sea cual sea la ruta gastronómica que elijas vas a acertar, encontrando el sello de identidad propio que los diferencia, basado en la calidad y la variedad de productos auténticos y tradicionales. Cada rincón de la isla brinda la posibilidad de descubrir deliciosos aromas que emanan de una gastronomía tan alegre como heterogénea. En ella se cultiva un exótico café, concretamente en el Valle de Agaete, y también luce con satisfacción los encantos de los productos propios: quesos artesanales, sal del océano, miel, frutas y verduras de mil colores, una jugosa repostería y un icónico ron elaborado en la bodega más antigua del continente.
No dejes de soñar con Gran Canaria, y cuando estés en la isla mira al cielo al caer la noche, la fascinación del firmamento estará ahí, casi podrás tocar las estrellas en un territorio que cuenta con el sello como Destino Turístico StarLight de Naciones Unidas. A lo largo de toda la geografía insular existen gran cantidad de observatorios astronómicos y miradores excepcionales desde los que contemplar la bóveda celeste. Los mejores puntos de observación del cielo nocturno se encuentran en las cotas más elevadas, a unos 1.800 metros de altitud, entre ellos el Mirador del Pico de las Nieves, los Llanos del Garañón o el Centro Astronómico Roque Saucillo, ubicado en la Vega de San Mateo. También dispones de dos Observatorios Astronómicos, el de Temisas, en el municipio de Agüimes, y el de La Aldea, ubicado entre algunos de los más increíbles barrancos que surcan la isla de forma radial.
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