UNA DE LAS ACTIVIDADES MÁS ANHELADAS POR LOS PASAJEROS HA SIDO SIEMPRE CONOCER LA MAGIA DE RAPA NUI.
Comprender la historia y los mitos que solo se logran entender cuando pisas el emblemático Aeropuerto Mataveri. Se comienza a respirar un aire tropical, diferente al continente, muy relajado, limpio, y es cuando te das cuenta de que este viaje será uno de los más especiales que realizarás. La llegada a la Isla de la Pascua es atractiva, colorida y alegre. Es que su encanto va tomando forma a medida que ves sus flores tan típicas, de distintos colores; los caballos salvajes paseando por toda la isla, al probar sus comidas con frutas tropicales, flores y hojas; el más puro estilo polinésico.
Este destino es ideal para personas en búsqueda de nuevas experiencias con culturas locales para conocer de cerca su historia y tradiciones, sobre todo de los moáis. Enterarse sobre el origen de las misteriosas estatuas de la isla, su historia y compararla con la historia de la isla de Hawái, con la cual comparten un origen común. Además, los rapanuís han logrado crear su propia historia de vida desde sus antepasados y mantenerla consigo, así como sus tradiciones polinésicas, tan representativas en sus hermosos trajes de colores y bailes.
La isla depara aventuras de ensueño para sus visitantes, desde tours guiados y excursiones hasta la degustación de café y los famosos helados de la Caleta. También, se puede disfrutar de los exquisitos sabores de los platos típicos como: pescado, ceviche de atún y empanadas, que son decorados de forma creativa día tras día.
Algo muy característico de la isla es que puedes gozar de una paz y tranquilidad única, ya que es una isla campestre y relajada, donde el tiempo no se acelera por nada. Todos los atardeceres logran un colorido perfecto para retratar hermosas e icónicas postales con las estatuas de fondo. Además, su gente tiene un encanto y amabilidad particular. Los isleños dan paseos en moto, cosa típica de la isla. Realizan sus famosos shows de baile; emocionan al público con sus ropas típicas y sus famosas coronas florales, con el sonido de sus tambores y sus cantos en rapanuí, que transmiten un sentimiento de orgullo.
Desde agosto de 2022, este destino se abrió nuevamente al público, luego de las restricciones por COVID-19. Esto permitió que la isla tenga un respiro y se muestre más pacífica y acogedora, sin duda una isla que contagia de magia a sus visitantes.