Los jardines infantiles de Soldeu, El Tarter y Canillo de Grandvalira cuentan desde esta temporada con un nuevo material didáctico que complementa la oferta pedagógica de la estación de esquí andorrana. Se trata de unos juegos didácticos para niños y niñas entre 2 y 6 años en los que se ha plasmado la riqueza natural y el entorno de nieve que rodea Grandvalira. El objetivo del proyecto es convertir las estancias de los niños y niñas en los jardines infantiles en experiencias integradoras en el medio natural, con un enfoque sostenible, a la vez que se promueven el mundo de los deportes de nieve y el propio entorno natural de estos tres sectores entre los más pequeños.
El proyecto ha estado liderado por los Servicios en Montaña de Soldeu - El Tarter de Grandvalira y ha contado con la colaboración de la empresa andorrana Made in grid, de la pedagoga Íngrid Roman, que ha diseñado y elaborado los juegos. En concreto, se han diseñado 7 juegos: un rompecabezas con dibujos de la fauna autóctona andorrana; un juego de memory que tiene el esquí como temática de sus ilustraciones; un dominó y un parchís ambientados en el invierno con copos de nieve y colores pastel; un encajable con diferentes formas geométricas, numéricas y de copos de nieve; un scrabble para formar palabras, y un juego para aprender a reciclar con la ayuda de unos contenedores de madera y unas fichas grabadas con los diferentes elementos a reciclar.
Para su elaboración se ha contado con materiales respetuosos con el medio ambiente, como la madera, que es en su totalidad de gestión forestal sostenible de origen UE; el metacrilato, que se fabrica con materiales reciclados y es en sí mismo también reciclable, o las bolsas para guardarlos que están hechas con algodón reciclado. Es un producto exclusivo de Grandvalira y sólo lo podrán obtener aquellos niños y niñas que participen en los jardines infantiles mencionados.
Con la culminación de este proyecto, Grandvalira da un paso más dentro de su programa social y de pedagogía en los jardines infantiles donde se busca, más allá de entretener y divertir, ser un acompañamiento en la educación medioambiental de los más pequeños y fomentar el respeto y la estima hacia el entorno natural andorrano.