Si existe un rasgo característico que defina Irlanda es su naturaleza. Su verde omnipresente, los prados y las extensiones abiertas que ocupan la isla de costa a costa. La isla ofrece un paisaje variado y rico, con lagos, montañas, fiordos costeros e islas, una naturaleza rica y muchas veces desconocida.
Con más de 7.000 km de costa y una naturaleza exuberante, ofrece infinidad de lugares donde llenar los pulmones de oxígeno limpio y dejar atrás el ruido.
Cualquiera que haya viajado por Irlanda sabe que el verde es el color predominante en cualquiera de sus condados, no en vano se le conoce cariñosamente como la Isla Esmeralda.
El verde es el color predominante en cualquiera de sus condados, no en vano se le conoce cariñosamente como la Isla Esmeralda
Su naturaleza, en estado puro, se presta a la práctica de numerosas actividades al aire libre. La isla invita a explorarla y a sumergirse en sus idílicos paisajes. Hay muchas cosas que se pueden hacer, montar a caballo, deportes acuáticos, innumerables excursiones a pie, senderismo….
Irlanda rebosa bosques, parques nacionales, playas y cascadas espectaculares.
Nueva pasarela entre árboles en el Avondale Forest Park y el tobogán más espectacular de Irlanda
Al sur de Dublín, a tan solo 65 km y en el condado de Wicklow, encontramos Avondale Forest Park, lugar de origen de la silvicultura irlandesa. En este parque podemos recorrer numerosas rutas de senderismo de distintas longitudes y a distintas alturas dentro del bosque, reponer fuerzas en un café con comida local, aprovechar su relajante zona de picnic o dejar a los niños disfrutando en su zona de juegos.
La gran novedad del Parque Forestal de Avondale es la pasarela de 700 metros que transita entre las copas de los árboles, a 35 m de altura, y la torre-mirador de 12 pisos -que ofrece unas vistas inmejorables de la campiña de Wicklow, el valle del río Avonmore y el valle de Avoca- y desde la que se accede a un tobogán en espiral, el más alto de Irlanda hasta el momento y una gran atracción para niños y adultos.
Glengarriff Woods Nature Reserve, una selva ancestral en el Atlántico norte
En la parte suroeste de la isla, en el condado de Cork, se encuentra la Reserva Natural de Glengarriff, un espacio natural muy especial y uno de los mejores ejemplos de bosque templado de Irlanda, de los que ya solo quedan fragmentos en la costa suroeste.
Llena de musgos y helechos, esta selva atlántica también cuenta con algunas de las plantas y flores más bonitas que se pueden encontrar en Irlanda. El espacio se puede recorrer en diferentes rutas en las que disfrutar de cascadas, ríos, prados, así como varias especies de animales como nutrias, armiños, zorros, ciervos o cabras montesas.
Lough Neagh, el lago más grande de las islas británicas
Nos desplazamos a Irlanda del Norte, muy cerca del aeropuerto de Belfast, para disfrutar de la masa de agua dulce más grande, no solo de la Isla Esmeralda, sino de las islas británicas, con casi 400 m2 de superficie.
La gran novedad del Parque Forestal de Avondale es la pasarela de 700 metros que transita entre las copas de los árboles
El lago Neagh es un espacio natural ideal para pasar unos días de vacaciones en familia, con amigos o en pareja, ya que dispone de todos los servicios imaginables. El lago cuenta con un magnífico puerto deportivo para que los amantes del agua puedan disfrutar de una gran variedad de deportes acuáticos.
Para los que prefieran otro tipo de actividades, la zona del lago dispone de numerosas rutas por senderos, castillos, parques, paseos en barca, restaurantes, golf, pesca y muchas otras opciones para todos los gustos. También es un lugar imprescindible para los aficionados de Juego de Tronos, ya que aquí se rodaron escenas de la quinta temporada.
Playa de Tramore, el paraíso surfista
Irlanda y el surf van de la mano y en el condado de Waterford, al sureste de la isla, encontramos una espectacular playa de arena dorada y aguas salvajes que hará las delicias de aficionados y expertos.
Esta espectacular playa de 5 km de longitud es muy popular para disfrutar de deportes acuáticos como el surf o el kayaking, y también es punto de encuentro habitual para grupos de nadadores. Es además un precioso lugar para pasear, pescar o simplemente disfrutar de la brisa marina. Además, el pueblo y la zona de Tramore tienen otros numerosos atractivos que bien merecen una visita, desde jardines japoneses a calas escondidas, pasando por la pintoresca zona urbana.
Howth Head, los acantilados estrella de la costa este y la ruta de senderismo más bella del condado de Dublín
Si solo vas a pasar unos días en Dublín y no te da tiempo a ir a los acantilados de Moher, no pierdas la oportunidad de visitar los acantilados de Howth, igual de impresionantes. Tras 45 minutos en cercanías (Dart), llegarás el pueblo de Howth, desde donde es posible realizar una sencilla ruta de 5 km hasta el Cabo de Howth (Howth Head) para disfrutar de unas espectaculares vistas de la costa.
La ruta sorprende con unas magníficas vistas hacia el norte sobre las islas de Ireland's Eye y Lambay y, en ocasiones, es posible vislumbrar hasta las montañas Mourne, en Irlanda del Norte. El sendero gira hacia el sur, ofreciendo vistas de la bahía de Dublín a las montañas de Wicklow. Durante el recorrido también se pueden observar aves y mamíferos marinos, y cuando se desciende a nivel del mar, se puede disfrutar de un chapuzón en algunas de sus tranquilas playas como Red Rock Beach, un remanso de paz y perfecto oasis con vistas a Dublín.