PLAY, la aerolínea islandesa lowcost, reúne los eventos más originales del calendario islandés. Los lugareños celebran una cantidad inusual de fiestas. Por supuesto, están las tradicionales, como el Día de la Independencia el 17 de junio o el Día del Trabajo el 1 de mayo. Ahora bien, Islandia acoge otros feriados que, a diferencia de los anteriores, sí que necesitan carta de presentación.
Día de la Mujer, entre el 18 y el 24 de febrero
El Día de la Mujer marca el final del mes Þorri y el comienzo del antiguo mes vikingo Góa. Este último era tradicionalmente recibido por la mujer de la casa la noche anterior, saliendo y dando la bienvenida a Góa, pidiéndole que fuera bueno. Se trata de una forma folclórica de esperar una primavera templada, y probablemente quedó asociada con las mujeres ya que la mayoría de los hombres estaban pescando en esta época del año.
Esta festividad es uno de los muchos testimonios del clima duro e impredecible de Islandia y un recordatorio de las penurias que sufrieron los islandeses en los días en que Þorri y Góa eran los meses más difíciles del año, ya que la comida escaseaba al final de un largo invierno. No es casualidad, pues, que el pescado fermentado y la carne aspic sean sus delicatessen hoy en día.
Día del Bollo, el lunes antes del Miércoles de Ceniza
Para algunos, el mejor día del año; para los que están a dieta, no tanto. De cualquier manera, podría decirse que nos encontramos ante la ingesta calórica colectiva más grande de la pequeña nación insular. El Día del Bollo está hecho para comer bollos de hojaldre de crema con mermelada y cubiertos con chocolate. No hay escapatoria, están en todas partes: en escuelas, oficinas, gimnasios, casas y restaurantes. Un consejo: sáltate el desayuno.
Día de la Explosión, el martes antes del Miércoles de Ceniza
Tic tac, tic tac. Sí, el día después del Día del Bollo se llama Sprengidagur en islandés, que literalmente se traduce como el Día de la Explosión. Para la mayoría, hace alusión a la sensación de estar explosivamente lleno después de comer una cantidad indecente de carne salada. Los islandeses, por lo general, se toman la palabra "explosivo" de forma literal, ya que son incapaces de resistirse a un festín. Los viajeros probablemente deban seguir la corriente ya que la Cuaresma comienza el día siguiente: el buffet tradicional incluye ricas carnes saladas y siempre se acompaña con frijoles.
Miércoles de Ceniza, primer día de Cuaresma
El Miércoles de Ceniza es conocido entre los católicos de todo el mundo como el primer día de Cuaresma. En Islandia, no obstante, no se celebra como uno imagina. Este día es principalmente para los niños, que se disfrazan y caminan por los comercios de su localidad pidiendo dulces. Por lo general, primero preparan un baile en la escuela y se presentan con sus disfraces antes de salir a la búsqueda de golosinas. ¿Suena a Halloween? En realidad no. Tienen que ganarse los dulces cantando, con un título de su elección. No hay dulce sin canción.
Otra tradición de este día es colgar pequeñas bolsas de cenizas de colores en las espaldas de los desconocidos desprevenidos. Esto requiere cierto grado de preparación y, aunque esta tradición ha quedado relativamente olvidada en las últimas dos décadas, algunos todavía pasean con bolsitas de colores con hilos en los días previos al Miércoles de Ceniza. La teoría detrás de esto es que antiguamente la gente llevaba las bolsas desde la iglesia y las mantenía para tener buena suerte.
Día de la Cerveza, 1 de marzo
A muchos les sorprenderá saber que la cerveza estuvo prohibida en Islandia hasta 1989. Y no solo era ilegal, sino que también era considerada antipatriótica, por su asociación con Dinamarca, país con el que cortaron lazos por completo en 1944. El 1 de marzo de 1989 se puso fin, tras 74 años, a la Ley Seca y nació el Bjórdagur, el Día de la Cerveza. Lejos han quedado los días en los que los islandeses elaboraban cerveza en casa. Actualmente, disfruta de una gran popularidad en el país y son muchos los eventos dedicados a esta bebida alcohólica. Así, con una Thule o una Gull en mano, los viajeros pueden descubrir la faceta más animada de Islandia. Skál!
Jónsmessa, el midsummer islandés, 24 de junio
Junio es un mes ideal para viajar a Islandia, ya que la oscuridad de los meses de invierno desaparece para ofrecer justo lo contrario: casi 24 horas de sol al día. El 24 de junio se celebra la llegada del verano y, antiguamente, se creía que esa noche sucedían fenómenos paranormales, como por ejemplo que las vacas hablaran o que las focas se convertían en humanos. Una tradición curiosa, por decirlo de alguna manera, de este día es revolcarse desnudo en la hierba y pedir un deseo. Dicen que se cumple, y además tiene propiedades curativas, ¿así que por qué no intentarlo?
Llegada del primer Yule Lad (Stekkjastaur), 12 de diciembre
A estas alturas, ¿alguien pensaba que las Navidades en Islandia iban a ser como las del resto de Europa? Islandia no se contenta con tener un Papá Noel, sino que prefiere tener trece, también conocidos como duendes de Yule. A lo grande. La Navidad se inaugura con la llegada del primero de ellos, el 12 de diciembre, en su descenso de las montañas. A partir de entonces y hasta Nochebuena, los niños reciben cada día pequeños obsequios en función del carácter de cada duende, cuya imagen ha ido mejorando con el paso de los años. Aunque cuidado, ¡porque aquellos que no se han portado bien, en vez de regalos, reciben una patata podrida!
Actualmente, PLAY vuela desde Tenerife, Gran Canaria y Alicante a Reikiavik. En abril reanudará los servicios estacionales desde Barcelona, y en verano estrenará las rutas desde Málaga (mayo), Madrid (junio) y Palma de Mallorca (junio) a la capital islandesa.