Con el fin de las restricciones, son cada vez más las personas que se animan a tomar esas vacaciones que tanto merecen y que todavía no han podido disfrutar. Por esta razón, las webs de reservas de hotel y actividades están empezando a repuntar a los niveles de antes de la pandemia. Sin duda, eso es una buena noticia, pero poco a poco, muchos viajeros empiezan a tener en cuenta el impacto medioambiental que generan en sus viajes. No solo nos referimos al medio de transporte con el que viajamos a nuestro destino, ya sea avión, tren o vehículo privado, existen pequeñas cosas en el día a día de nuestros viajes para reducir nuestra huella medioambiental y así contribuir a la sostenibilidad del planeta. En este artículo, damos algunos consejos para viajar de forma sostenible y sin dañar al medio ambiente.
Lava la ropa tu mismo y reduce la huella medioambiental
Aunque a todos nos gusta atiborrar la maleta de prendas que ni siquiera vamos a ponernos durante nuestro viaje, es posible que esa no sea la mejor opción. Lo cierto es que muchas veces viajamos con ropa de más, y si acabamos usándola toda, confiamos en el servicio de lavandería del hotel para que se ocupe de ella. Aunque esto puede resultar muy cómodo, la verdad es que es injusto para el medio ambiente, ya que se consume una gran cantidad de agua y energía para algo que no es una prioridad. Por esta razón, muchos viajeros optan por lavar la ropa en el baño durante su viaje, lo que ayuda a reducir el consumo de agua en el lugar de destino. Para ello, muchos turistas deciden confiar en empresas comprometidas y usar productos con bajo contenido en plástico y que lavan bien con bajas temperaturas. Eso permite lavar cada prenda de forma individual y secarla directamente en la habitación, sin hacer gastos de energía innecesarios.
Sumérgete en la cultura local
Una de las mejores formas de contribuir al lugar donde viajamos es sumergirte en su cultura local. Claro que a todos nos apetece de vez en cuando cenar en una franquicia de hamburguesas o tacos, pero si nos hemos cruzado medio mundo para nuestras vacaciones, quizás no es la mejor opción. Por eso, la mejor forma de apoyar al lugar donde viajamos es recorrer sus bazares, comprar artesanía local, reservar en restaurantes auténticos. Además de ser un consumo más sostenible, eso nos permite vivir una experiencia auténtica de nuestro destino, ya que es la mejor forma de conocer a sus gentes y sus costumbres. Siempre intenta informarte de las tradiciones, idioma y cultura antes de viajar, ya que puede suponer la diferencia entre pasar unas vacaciones normales y unas increíbles. La gente local aprecia mucho que los extranjeros hablen su lengua y se interesen por sus tradiciones, por lo que si realizas ese esfuerzo, la experiencia será mucho más gratificante.
Existen muchas joyas turísticas al alcance de la mano formas de viajar, sin embargo, cada vez más personas tienen en cuenta el factor medioambiental antes de elegir un destino. Siguiendo estos consejos podemos exprimir al máximo nuestras vacaciones al mismo tiempo que somos respetuosos con el planeta.