La Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos) afronta con gran preocupación la llegada del otoño y más allá del mes de octubre. Las previsiones para los meses de septiembre y octubre no son halagüeñas, ya que se augura una caída de 29,68 puntos y de 35,39 -respectivamente- frente al mismo periodo de 2019.
Ante este panorama, el presidente de Aehcos, José Luque, aboga por una ampliación de los ERTE. Hay que recordar que el vencimiento de la última prórroga se producirá el próximo 30 de septiembre. “El sector del turismo ha resultado claramente afectado por esta situación de pandemia y los empresarios necesitamos herramientas eficaces que nos permitan paliar las pérdidas sufridas”, solicita.
Según el presidente, los hoteleros viven con incertidumbre la recuperación de los mercados internacionales, que no están respondiendo como se esperaba. “De hecho, como ya hemos comentado, ha sido el turismo nacional el que ha salvado la temporada estival en Andalucía”, ha recordado José Luque.
Un otoño incierto
Finalizados los meses más fuertes en cuanto a turismo se refiere, el sector afronta un otoño incierto. Según las previsiones, en septiembre se espera una ocupación del 57,06%. Por municipios, Marbella prevé una ocupación del 68,67%, Málaga del 67,70% y la costa oriental -Nerja, Frigiliana y Torrox- un 67,86%. Se trata de unos datos muy por debajo de los resultados obtenidos en 2019.
En cuanto al próximo mes de octubre, los datos empeoran, ya que se espera una ocupación del 42,38%. Por municipios, los más visitados coinciden con septiembre. Así, Marbella espera una ocupación del 62,94%, Málaga del 53,96% y la costa oriental del 47,82%.
En ambos meses existe un denominador común: tal y como pone de manifiesto el Comité Ejecutivo de Aehcos, el grado de ocupación media previsto en septiembre y octubre es muy diferencial en zonas enfocadas al turismo urbano respecto a los destinos más especializados en sol y playa, por lo que, ante esta circunstancia, se espera ya un cierre progresivo de establecimientos en las zonas más afectadas por el descenso de la demanda y fundamentalmente para los meses posteriores a octubre.
“Tenemos que estar preparados para hacer frente de nuevo a unos meses complicados, de ahí que reiteremos la necesidad de articular medidas con antelación que permitan a los empresarios planificar el nuevo escenario”, aunque nuestro objetivo real es la recuperación y la estabilización del empleo, añade José Luque.