El Círculo Ecuestre ha celebrado este jueves una nueva sesión del Foro Agendas Cruzadas Madrid – Barcelona, con la doble participación de Maurici Lucena, presidente y consejero delegado de Aena, y Jaume Collboni, Primer teniente de alcaldía en el Ayuntamiento de Barcelona.
Tras la bienvenida habitual a cargo de Antonio Delgado, presidente del Círculo Ecuestre, y la presentación de Enrique Lacalle, vicepresidente del Círculo Ecuestre, los invitados han dialogado sobre diversas cuestiones ligadas a la actualidad con Manel Pérez, subdirector de La Vanguardia y periodista especializado en información económica.
Uno de los temas centrales del coloquio ha sido el plan de ampliación del Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, proyecto que persigue convertir el aeródromo en un hub internacional. Para ello, la gestora tiene previsto realizar una inversión de 1.700 millones de euros, cuantía que destinará a la ampliación de la tercera pista -lo que permitirá aumentar hasta 90 operaciones a la hora, en lugar de las 78 actuales- así como la terminal satélite. Con estas obras, la gestora cuenta con ampliar la capacidad de pasajeros del segundo mayor aeropuerto del país, pasando de los 55 millones actuales a 70.
Esta cuestión se encuentra en este momento en búsqueda de consenso entre las distintas partes involucradas: la propia gestora, el Govern de la Generalitat y los ayuntamientos de los municipios sobre los que directamente impacta la operativa diaria del aeródromo: Barcelona, El Prat de Llobregat, Gavà y Castelldefells. La decisión final deberá tomarla formalmente el recién estrenado Consejo de Ministros antes del final del mes de septiembre, por lo que urge que la decisión en el territorio se tome lo antes posible. Ante este hecho, el presidente y consejero delegado de Aena, Maurici Lucena ha comentado: “Lo que necesitamos, al calor de las mesas técnicas que se están celebrando, es que el Govern de la Generalitat de Cataluña diga qué quiere sobre el proyecto de ampliación”.
A estas palabras se sumaba también Jaume Collboni, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona: “Nos jugamos más que la ampliación física de un aeropuerto, nos jugamos el modelo de economía de país para el futuro. Barcelona y Cataluña tienen que estar mejor conectadas de forma transcontinental con las grandes ciudades del planeta que generan talento, inversión y tecnología”. Collboni añadía también que más allá del debate del aeropuerto y con motivo de la continuada situación política Cataluña ha tenido paralizados distintos proyectos que ahora deben ser recuperados: “Cataluña ha estado paralizada por decisiones políticas y ahora que estamos en una vía de normalización, tenemos que desbloquear todos estos proyectos. El del aeropuerto es uno, pero no el único. Hablo de las líneas 2 y 9 del metro o del plan de renovables que nos está desposicionando frente al conjunto de España y Europa. Hemos pasado del riesgo de ruptura al riesgo de bloqueo por la indecisión”.
Comparativa con Madrid
La ampliación del aeropuerto de El Prat no es la única que Aena tiene encima de la mesa. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurre con el aeródromo catalán Barajas tiene ya encarrilado su macroproyecto para potenciar su papel como hub intercontinental. “Estoy pasmado. En Madrid no ha habido ni una sola voz en contra, todo el mundo ha dado por supuesto que un elemento de la competitividad y el crecimiento económico es el refuerzo de un aeropuerto que ya es un hub. Aquí (Cataluña) llega una empresa (Aena) y propone hacer una inversión de más de 1.700 millones de euros y te encuentras con que ‘esto es un chantaje’ y que ‘ponemos a Cataluña entre la espada y la pared’. Es desasosegante la comparación con Madrid”, se lamentaba Lucena.
Preguntado directamente por el moderador del evento sobre si cree que Aena cuenta con una histórica “mala prensa” en Cataluña por haber favorecido a Madrid sobre Cataluña, Lucena insistía: “Razón de más para aprobar este proyecto. Esta es la ocasión de desmentir el mito de que Aena tiene predilección por Madrid sobre Cataluña”.
Obstáculo medioambiental
El principal escollo del plan de Aena para la ampliación del aeropuerto de Barcelona es su impacto medioambiental, debido a la desaparición del espacio natural de La Ricarda, una zona reconocida con el sello ‘Red Natura 2000’. A ello, se suman también el temor al incremento de las emisiones de CO2 como consecuencia de un mayor número de operaciones en el aeropuerto. Frente a esto, Maurici Lucena ha querido contextualizar los datos: “Las emisiones del transporte aéreo representan el 4% del total de las emisiones contaminantes”. Añadía además el primer ejecutivo de Aena que para el año 2031- año en que finalizarían las obras de ampliación con la actual hoja de ruta- el aeropuerto de Barcelona estará cerca de alcanzar las cero emisiones netas, con una reducción de emisión por pasajero del 94%, “con respecto a hace pocos años”.
Necesidad de un modelo turístico nuevo
Durante el debate de hoy, el primer teniente de alcalde no ha querido desaprovechar tampoco la oportunidad de pedir un nuevo modelo turístico de Barcelona, tomando como excusa la nueva oportunidad que ha brindado la crisis sanitaria. “La pandemia nos ha enseñado en Barcelona a disfrutar de una ciudad en silencio y ahora no lo queremos perder. Evidentemente, la industria turística es importantísima -en algunos barrios se han registrado unos niveles de paro de hasta el 50%- pero, a la vez, se ha reforzado la idea de que tampoco queremos volver al modelo anterior de millones y millones de visitantes. Queremos un turista que respete y aprecie el destino”.
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