Glovo, la app que permite a los usuarios recibir y enviar al momento cualquier producto dentro de una misma ciudad, ha sumado más de 2.500 restaurantes en los últimos tres meses, de los cuales más del 20% son de alta cocina. Estas nuevas circunstancias han impulsado a muchas pymes a innovar en sus procesos para seguir llevando sus creaciones a los consumidores y, aunque la desescalada permitirá que pronto se pueda volver a los emblemáticos locales, el sector de la restauración se ha subido al carro del delivery para quedarse.
Como resultado, Glovo sigue ampliando su red de partners locales con los restaurantes más top de Madrid y Barcelona. Se trata de locales que destacan por su emblemática historia o porque, por la calidad de su oferta gastronómica, se han convertido en rincones de moda en ambas ciudades.
Madrid
La vanguardia gastronómica de la capital que no podía faltar a esta tendencia:
Amparito Roca. El restaurante alcarreño de alma soriana pone a disposición del delivery su cocina clásica de autor: entre otros, se pueden degustar a domicilio sus torreznos, su gazpacho o sus callos.
Tepic. Se trata de uno de los mejores mexicanos de Madrid, que pone a disposición del delivery con Glovo su cocina tradicional, alejada de clichés; como su guacamole, sus quesadillas de flor de calabaza o sus tacos inconfundibles.
Juana la Loca. El emblema se ha reinventado y ahora ofrece las mejores tapas de La Latina a domicilio; sus tortillas y sus pintxos de roast beef, su tiradito de corvina trufado o su foie gras de pato a la plancha.
Cristina Oria. La alta cocina de una de las restauradoras y cocineras más famosas de Madrid añade el toque gourmet a la oferta de Glovo. Ya se pueden degustar sus platos dulces y salados como las tablas, la tortilla de patata con berenjena y aceite de trufa o las pechuguitas de pollo rellenas.
Ikigai. La oferta gastronómica de negocios locales de Glovo traspasa fronteras con su cocina de fusión japonesa con producto español e influencia francesa. Ya se pueden comer en casa sus nigiris, temakis y uramakis, entre otros.
Barcelona
En la capital catalana, cuna de los restaurantes tradicionales que nunca pasan de moda, se encuentran:
Bar Cañete. Famoso por su barra y sus auténticas tapas como, por ejemplo, la bomba picantona de la Barceloneta, la croqueta de bogavante o la ensaladilla rusa de la Mari.
Flash Flash. También se ha unido a Glovo la glamourosa e histórica tortillería, todo un icono en la Ciudad Condal desde hace 50 años, con sus hamburguesas y sus famosas tortillas -entre las que destacan la de trufa y queso o ‘la Panadera’-.
Il Giardinetto. Todo un clásico en Barcelona y un italiano con mucha historia en la capital catalana. Están disponibles una amplia variedad de platos, entre los que destacan sus risottos -de setas o de cangrejo y gambas- y platos de pasta -como los panzerotti al funghi con crema de trufa negra-.
Restaurant Suculent. Famoso por sus platos de siempre preparados siguiendo técnicas actuales, es otra de las últimas grandes incorporaciones en Glovo con sus entrantes y aperitivos -como la brandada de bacalao o paté de mejillones en escabeche- y con sus guisos – por ejemplo, como el rabo de vaca guisado al chocolate negro-.
Sacha. La app de delivery no se ha olvidado del postre, un indispensable en cualquier comida. Llega de la mano de una de las pastelerías más emblemáticas en la capital catalana -y operativa desde 1927-, con sus ‘minis’ de fruta, su tarta de crema de limón o sus óperas, para los amantes del chocolate.
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