Los delfines y ballenas siempre estuvieron en las aguas del Estrecho de Gibraltar, pero todos los años, bien entrado el verano las orcas se dejan ver con más facilidad. Desde mediados de julio hasta mitad de septiembre se pueden avistar en la zona alrededor de 40 orcas, agrupadas en cinco familias, según las embarcaciones que a diario salen del puerto de Tarifa para contemplarlas.
Las orcas tienen entre tres y ocho metros de longitud y su peso oscila entre las 2,5 y las 9 toneladas de peso. Asombra contemplarlas en su medio natural, jugando con las embarcaciones, entrando y saliendo de esa lámina de agua en la que se unen el mar Mediterráneo y el océano Atlántico.
Entrado el verano las orcas se dejan ver con facilidad en el Estrecho de Gibraltar
En la actualidad, varios operadores trabajan en Tarifa en el avistamiento de delfines y ballenas en el Estrecho de Gibraltar, uno de los pasos de animales migratorios más ricos del mundo, declarado parque natural en 2006.
Los delfines listados, los mulares, los comunes y los calderones tienen su hábitat en este Estrecho que separa África y Europa, pero entrada la primavera es posible avistar esporádicamente cachalotes y mamíferos tan impresionantes como los rorcuales, con sus 20 metros de longitud y más de 80 toneladas de peso, el segundo animal más grande del planeta.
Las orcas se dejan ver con más frecuencia en verano, porque van en busca de los atunes que en esta época cruzan el Estrecho de Gibraltar hacia el Atlántico.
Las embarcaciones que trabajan en Tarifa calculan que entre todas, cada año, unas 80.000 personas se embarcan en estas expediciones educativas y de ocio en la Costa de la Luz, con al menos una salida diaria en invierno y hasta las quince en verano en diferentes barcos y horarios.
El viaje al corazón del Estrecho dura ente dos horas y tres horas y media, y es una oportunidad estupenda para conocer la vida marina, acompañados de una tripulación que conoce bien el medio y que habla en varios idiomas.
Le contarán curiosidades como que la presencia de estos mamíferos en la zona es tan antigua, que hasta una sociedad noruega fundó allí en 1920 una factoría ballenera que tras cambios de titularidad, cerró definitivamente –para fortuna de las ballenas- en 1963.
Los delfines listados, los mulares, los comunes y los calderones tienen su hábitat en este Estrecho que separa África y Europa
Pero además de estas empresas, hay investigadores y biólogos que han contribuido a difundir este patrimonio natural, a crear conciencia sobre su existencia y a que la población marina del Estrecho sea valorada, estudiada y protegida.
Para Whale Watch Tarifa, pionera en embarcar a los visitantes para que vieran a las ballenas y a los delfines en el Estrecho, “Tarifa es una de las ciudades más atractivas y cosmopolitas de Europa. Es un punto de encuentro de jóvenes de todos los rincones del mundo, atraídos por estas playas tan espectaculares y por el wind y el kite surf y si además le sumas cómo se puede disfrutar de la naturaleza aquí, la diversión está garantizada”.
Turmares Tarifa añade que además de sus excursiones para el avistamiento de cetáceos, recopilan datos sobre los animales observados, que trasladan a los congresos que se realizan sobre la materia.
El Centro de Interpretación de Cetáceos y Aula del Mar de Tarifa se encuentra en la antigua lonja, un espacio expositivo nacido para la divulgación la vida marina del Estrecho. ASACETA (Asociación de Avistadores de Cetáceos del Estrecho, Tarifa y Andalucía) es la encargada de coordinar este espacio.