A principios de noviembre comienza en España (incluso algo antes según la zona) la temporada de castañas, un fruto seco claramente otoñal que casi siempre relacionamos con nuestra infancia, cuando las asábamos en la chimenea entre los rescoldos del día anterior. Cada vez más presente en gastronomía por estas fechas, es además un alimento rico en hidratos de carbono, fibra, magnesio, hierro y hasta vitamina B.
Este mes, la cadena de hamburgueserías Timesburg se atreve con ellas en su burger especial La Marrameu, con pan de amapola y otros dos productos igual de otoñales como la calabaza (a la parrilla) y las setas (champiñones en escabeche y mahonesa de boletus)
Habitual en caldos, guisos y potajes en estos meses de otoño, la castaña es perfecta también para acompañar platos de caza (en puré o asada) y hasta en postres, conocemos varios ejemplos dentro de las cocinas de Extremadura, Castilla y León, Galicia y sobre todo Cataluña. Además, la castaña es un fruto seco muy navideño que en algunos países se consume por esas fechas en sopas, puddings, postres como strudels y de guarnición con perdices, venado o gamo, o bien como relleno de un pavo.
Aunque muchos las consumen glaseadas (las deliciosas marrón glacé), es asada la manera preferida de comerlas en España, pudiéndolas encontrar también en conserva o en harina para repostería. Lo que no es tan común es ver castañas dentro de una hamburguesa, como sugiere este mes con “La Marrameu” la cadena catalana Timesburg. Se trata de una burger en pan de amapola con carne de vacuno 100% ecológica, calabaza a la parrilla, rúcula, champiñones en escabeche y mahonesa casera de ceps y castañas. Una hamburguesa decididamente otoñal
Toma castaña
Estos son los platos típicos del otoño, invierno y navidades que podemos comer con castañas, bien como ingrediente principal o secundario.
Cómo no, castañas asadas, un clásico de la Navidad que junto con las nueces, nunca falla.
Castañas en conserva, mermelada o crema, fuente de energía a raudales y también de fibra e hidratos, ideal para el desayuno o la merienda. También en dulce, destacan las marrón glacé, un postre gourmet altamente calórico pero igualmente delicioso.
Con verduras como por ejemplo la lombarda, otro clásico por Navidad con algunas recetas que suelen incluirla.
Con arroz, especialmente en risottos con setas, formando una dupla de lo más otoñal acompañados de lascas de queso y especias aromáticas.