La Federación OPC España celebra en Madrid su tradicional encuentro de otoño con la industria del turismo de reuniones. Esta cita anual que se celebra en el mes de octubre viene siendo un encuentro obligatorio para el sector MICE. En esta ocasión la reunión se celebró en el Restaurante Al Socaire y estuvo patrocinada por la ciudad de Santander.
Matilde Almandoz, presidenta de la Federación, dio la bienvenida a los asistentes entre los que se encontraban Miriam Diaz, Concejal de Turismo, Comercio, Mercado y Relaciones Institucionales del Ayuntamiento de Santander, el Comandante Iván Hormigos de la Dirección General de la Guardia Civil, asociaciones, instituciones, profesionales y amigos del sector.
La cuarta edición del puchero comenzó con las palabras de la presidenta de la Federación: “El puchero es como el MICE y viceversa. El mundo de los eventos y las reuniones es como una gran cadena de valores que necesita que cada uno de los elementos que la conforman sean profesionales y cualificados, y que la mano que lo prepare sea excelente, como los propios ingredientes y el chef que componen el puchero”.
Miriam Díaz, concejala del Ayuntamiento de Santander destacó en su discurso los hándicaps de las ciudades del tamaño de Santander, pero resaltó también que “este tipo de ciudades ofrecen muchas oportunidades para los eventos y reuniones”. Miriam señaló que, según los índices del Ministerio del Interior, Santander es una de las ciudades más seguras de España, con los menores índices de criminalidad, doce puntos por debajo de la media nacional. Un dato que, para la concejala “se consiguen entre otras razonas gracias a la colaboración que desde Santander Convention Bureau hacemos tanto con la parte privada de las empresas, como con la parte institucional, y sobre todo gracias a la gran flexibilidad de los agentes implicados”.
El tema central del encuentro sobre la “Colaboración público-privada en la organización de eventos: Seguridad e inteligencia” corrió a cargo del Comandante Hormigos. Para el comandante “la respuesta más profesional que garantice el éxito de un evento debe conjugar la necesaria flexibilidad y comodidad en el acceso y desarrollo del mismo”. También señaló que “la falta de preocupación por la seguridad puede transformar un evento de éxito en una catástrofe irreparable”.
Durante su discurso señaló que la seguridad pública y privada deben ser potenciadas. En este caso, “la información es una ventaja competitiva, por ello no hay que dudar en informar siempre a los cuerpos de seguridad de los eventos previstos”. Para terminar su intervención mencionó que “la inteligencia es imprescindible en el análisis de riesgo sobre el que fundamentar la citada flexibilidad y adaptación, permitiendo equilibrar el binomio de seguridad y libertad”.