La Diputación de Valladolid ha dado a conocer su catálogo de experiencias enogastronómicas a más de un centenar de profesionales del sector en un acto que en el Hotel Meliá Castilla de Madrid.
En él, las tres Rutas del Vino certificadas de la provincia –Cigales, Ribera del Duero y Rueda– presentaron algunas de las propuestas que el visitante puede encontrar en su viaje a esta tierra.
Valladolid es una tierra de contrastes donde se puede disfrutar de inolvidables puestas de sol. Es una provincia de inmensas llanuras regadas por el Duero y el Pisuerga, coronadas por imponentes castillos; de un rico patrimonio histórico y cultural y de tradiciones ancestrales como la Semana Santa, declarada de Interés Turístico Internacional. Y, por supuesto, Valladolid es tierra de vino.
El vino forma parte del ADN de la provincia. Modela su paisaje, con más de 22.000 hectáreas de viñedo e innumerables bodegas, y aporta un valor añadido al resto de su producto turístico. Valladolid cuenta con 5 Denominaciones de Origen –Rueda, Ribera del Duero, Cigales, Toro y Vinos de la Tierra de León–, única región española que tiene tal número, y tres Rutas del Vino certificadas, Cigales, Ribera del Duero y Rueda, quienes ofrecen durante todo el año una amplia oferta de actividades para el visitante con el vino como hilo conductor.
El presidente de la Diputación de Valladolid destacó que desde hace 20 años “el incremento de visitantes ha sido exponencial y no solo por la calidad de los vinos”. Jesús Julio Carnero atribuyó este incremento a “la calidez de las gentes de Valladolid” y a “la capacidad de los empresarios turísticos y de los ayuntamientos de ampliar esas visitas a otros recursos culturales, históricos, de naturaleza y gastronómicos”. Tampoco quiso olvidarse del “esfuerzo de viticultores y bodegueros, que con sus manos han hecho de esto un milagro”
El acto, diseñado a modo de workshop con 31 bodegas vallisoletanas, incidió en la importancia de hacer sentir en directo a los visitantes aquello que pueden vivir cuando visiten Valladolid. Por ello, tras la presentación, se realizaron numerosas experiencias en vivo para grupos reducidos, como maridajes de vino con chocolate, miel o turrón o catas de los diferentes caldos, todas ellas parte del catálogo que ofrecen las tres rutas de la provincia.
Un evento que sirvió como aperitivo de FITUR, la feria internacional de turismo más importante del mundo –que se celebra del 23 al 27 de enero en IFEMA– en la que Valladolid participará dentro del stand institucional de la Junta de Castilla y León (Pabellón 7, stand 7B02) y donde el visitante podrá ampliar la información acerca de la oferta vitivinícola de esta tierra. Una tierra que huele y sabe a vino.