Bó Finn es ahora un nuevo restaurante ubicado en uno de los esquinazos más famosos de Madrid. En la calle Velázquez 97, donde cruza con Diego de León, nos espera este gastropub elegante y sofisticado que, además, ha renovado su carta.
De lo que fue el Bó Finn original tan sólo conserva el nombre y algunos guiños, como su exquisita carta de cervezas y su maravilloso suelo, hecho con antiguas traviesas de las vías del tren traídas de Irlanda. Un suelo “por el que han pasado muchas vidas, muchas historias”. Pero su decoración es moderna, de lujo relajado y cómoda. Pensada para que los clientes se sientan cómodos mientras cenan y disfrutan de una copa después.
Nueva carta
La carta del nuevo Bó Finn ha dado un giro completo, adaptándose a los gustos de los comensales del barrio de Salamanca. Una cocina actual que ofrece dos alternativas: tapear de forma informal y comidas y cenas de gran calidad.
Para tapear hay una exquisita variedad: tostas, bocatines, mini hamburguesas, croquetas… con algunos platos muy originales, como la porra rellena de ensaladilla de pulpo, la causa limeña con mejillones templados en escabeche, el enoki en tempura con salsa de sésamo y salmorejo o el bocatín de calamares en su tinta con huevo de codorniz.
Para comer, y sobre todo, cenar, el nuevo Bó Finn ofrece un espacio muy agradable y una carta aún mejor. Platos ligeros, como alcachofas confitadas a baja temperatura con gambas al ajillo, fuertes, como entrecot de ternera charra madurada o pulpo a la grasa, e, incluso, de cuchara, como el risotto de pata de ternera con chipirones y escabeche.
Sobre Bó Finn
Bó Finn, ubicado en la calle Velázquez esquina con Diego de León, es la reinvención de uno de los clásicos de mayor éxito del barrio de Salamanca: de taberna irlandesa a gastrobar. Conservando su sello de local acogedor y cálido, con una gran ubicación, ofrece un espacio renovado, sofisticado, de lujo relajado, que incorpora una cocina actual, en línea con las tendencias más avanzadas en gastronomía. El espacio es elegante pero informal, diseñado para acoger diversos usos (desde divertidos Bruchs de domingo hasta cenas, eventos privados e, incluso, el ya tradicional afterwork). Su carta complementa una oferta que va mucho más allá de un local de copas convencional, ya que Bo Finn representa la apuesta definitiva por la hostelería Premium y lifestyle del siglo XXI.