España es un país muy turístico. Cuenta con ciudades ampliamente conocidas a nivel internacional, como Madrid o Barcelona. Su agradable clima y sus numerosas playas son también otro de los motivos por los que los turistas eligen este país, sin olvidar la gastronomía. De hecho, solo en el mes de septiembre, España recibió 8,9 millones de turistas internacionales, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, siendo más de 66 millones los visitantes que han venido a España en lo que llevamos de año.
Son cifras positivas que todavía podrían acrecentarse más si iniciativas como las que están poniendo en marcha en Castellón y en Málaga salen adelante. Ambas se han propuesto impulsar otro tipo de turismo en España, el idiomático. Es decir, pretenden atraer turistas que estén interesados en aprender español, principalmente estudiantes.
Para ello, representantes de Málaga han asistido al último encuentro Alphe Russia, en San Petersburgo. Se trata de una de las principales reuniones europeas sobre turismo lingüístico, donde acuden tanto agentes rusos especializados en este segmento como profesionales de otros países como Kazajistán, Azerbaiyán, Kirguistán, Bielorrusia, Italia, Reino Unido y Ucrania. El objetivo es llegar a acuerdos con ellos.
En el caso de Castellón, la diputación está promocionando la provincia como destino de turismo idiomático entre turoperadores internacionales llegados de Alemania, Corea del Sur, Holanda, Italia, Ucrania y Tailandia. Se les muestran las escuelas de idiomas además de los otros atractivos de la región castellonense.
Obviamente, España no es el único país que impulsa el turismo idiomático. De hecho, muchos de los turistas que viajan a Reino Unido lo hacen para aprender inglés. Y lo mismo ocurre en Alemania y también en Francia. Ahora es España la que también quiere sumarse a esta oferta turística, para que, más allá de aprender las frases básicas para comunicarse, los visitantes se interesen más por el idioma y, por ende, por la cultura.
En el último año, casi 860.000 turistas visitaron España por motivos académicos y, de ellos, muchos lo hicieron por cuestiones relacionadas con el idioma. Cabe recordar que el español es la segunda lengua materna más hablada del mundo, después del chino mandarín. Por lo que no es descabellado querer impulsarlo como reclamo turístico. Además, los expertos aseguran que el turismo idiomático tiene otra ventaja, pues genera prescriptores y demanda potencial para el futuro. Es decir, los alumnos que viven temporadas en España para mejorar el idioma, crean lazos con la ciudad donde se alojan y seguramente acabarán siendo los mejores embajadores de estos lugares cuando vuelvan a sus países.