El kebab se puede disfrutar de distintas formas, en plato, enrollado o con pan de pita tostado o pan libanés.
¿Cómo los prefieres?
Elaborados con materias primas autóctonas y de primera calidad, siempre preparados al momento, los kebabs se sirven con pan libanés, de pita con un toque final tostado o en plato, convirtiendo este manjar típico turco, máximo exponente de la comida rápida junto a pizzas y hamburguesas, en uno digno del mejor restaurante Premium, algo que no es de extrañar ya que sus propietarios se basaron en la premisa de transformar este tipo de comida en una verdadera experiencia gastro, inspirándose en productos de calidad, naturales y sin aditivos, con locales de diseño alejados del desolador ambiente de los clásicos establecimientos de kebabs.
Lo más común, es pedirlo en pan de pita, que es plano y más bien blandito, originario de Grecia y popularizado mayormente por todo el Mediterráneo y el Oriente Próximo. Se elabora con harina de trigo, aceite, agua, sal y levadura a temperaturas que llegan a más de 200º, perfecto para sándwiches, los típicos gyros que arrasan en Atenas, falafel, burritos y por supuesto kebabs.
Kebab enrollado… con huevo frito!
Son muchos los kebabs que ofrece la carta de Bellako (de pollo, ternera Angus o cerdo ibérico, además del Veggie) pero también las maneras de comerlo, es cuestión de gustos. Si hablamos de sus carnes, sus kebabs de pollo del Ampurdán son de excelente calidad, macerado con aliño casero para confeccionar diariamente sus pinchos de pollo y servirlos en los llamados PIKARO, MAKIAVELO, BRIE o MIYAMOTO. De ternera Angus, deliciosos filetes a la parrilla troceados a cuchillo, para dar protagonismo a esta carne en los BLACK ANGUS, GAUCHO y CABRONAZO. Si hablamos de cerdo ibérico, nada menos que un buen secreto llegado desde la Sierra de Huelva, jugosa y tierna entre las especies porcinas para probarlo en el IBÉRICO, el DIABLO o el BELLAKO.