Cuando los estudiantes deciden empezar la universidad, muchas veces es difícil saber qué itinerario de la carrera escoger y es necesaria una experiencia más real para decidir a qué se quieren dedicar el resto de su vida. Esta es la razón por la cual sumergirse completamente en el estilo de vida de otro país es una oportunidad increíble que permite conocer gente nueva, culturas diferentes y una forma de vida fascinante.
Averiguar los pormenores de estudiar en el extranjero puede parecer complicado para algunos estudiantes, dando lugar a dudas e inseguridades. Sin embargo, hay numerosas compañías y organizaciones completamente preparadas para ayudarlos, desde las que ofrecen becas hasta aquellas que facilitan la búsqueda de alojamiento.
Está claro que este tipo de decisión da lugar a un cambio de vida importante, y también aporta muchos beneficios que ni siquiera se tenían en cuenta. Es por ello que HousingAnywhere presenta 5 razones para hacer prácticas en el extranjero.
Aumentan las posibilidades de ser contratado en un futuro
El hecho de hacer prácticas en el extranjero implica sumergirse en una experiencia gratificante y beneficiosa, factores que tienen muy en cuenta los responsables de recursos humanos de muchas empresas que apreciarán el hecho de que una persona haya decidido expandir sus horizontes abrazando una nueva cultura y una gran cantidad de desafíos.
Estudiar fuera también permite comprobar la capacidad de adaptación a situaciones nuevas y entornos diferentes y desarrollar nuevas habilidades, lo que puede ser clave a la hora de afrontar una futura entrevista de trabajo.
Unas prácticas en el extranjero benefician el currículum
Cuando se está a punto de entrar en el mundo laboral, es muy importante pensar en el currículum y en cómo hacerlo para destacar entre la multitud de personas que también demanden ese trabajo.
Una de las mejores formas de hacer destacar el currículum es estudiar en el extranjero, ya que cuando una empresa ve que un candidato ha hecho unas prácticas en el extranjero o ha participado en un programa de intercambio, las posibilidades de ser contratado aumentan; demuestra que el candidato es una persona que hará un esfuerzo adicional para garantizar el éxito de esa empresa
Son una oportunidad para abrir la mente
Mudarse a un país extranjero y estudiar en una universidad de allí es realmente un cambio de vida. Incluso unas prácticas de 6 meses pueden descubrir aspectos de una persona que ni ella misma sabía que existían. A pesar de que el objetivo principal es estudiar o trabajar, no hay que perder la oportunidad única de abrir la mente a nuevas culturas y personas, para ver puntos de vista nuevos y completamente diferentes.
Permiten aumentar los contactos profesionales
Cuando uno se plantea ir a estudiar al extranjero, probablemente se imagine multitud de experiencias diferentes y todas ellas pueden beneficiar profesionalmente en más aspectos de los que uno piensa.
Aprender y trabajar más allá de aquello a lo que uno está acostumbrado, permite ampliar la red profesional de muchas maneras, agregando más experiencia a las habilidades que ya se tenían.
Asimismo, participar en organizaciones de estudiantes da la oportunidad de estar en contacto con otras personas del mismo campo laboral y conocer a más gente con la que se puede ir configurando un entorno de contactos profesionales que no tiene precio en el mundo laboral y puede ser muy beneficioso de cara al futuro.
Proporcionan un mejor conocimiento de otros idiomas
Poder defenderse correctamente en otro idioma en una entrevista de trabajo o ser capaz de mantener una conversación con las personas locales de otro país, podrían ser otras razones por las que es importante y muy útil haber hecho prácticas en el extranjero.
Durante la estancia en otro país, hacer cursos de idiomas en la universidad, o simplemente hacer nuevos amigos y conocer nuevos lugares permite ampliar el conocimiento de un idioma. En función del país, también es posible aprender más de un idioma, ya que muchas ciudades se han convertido en verdaderos centros de fusión de idiomas. En algunas ocasiones, comprender qué métodos utilizan los hablantes de inglés no nativos cuando aprenden el idioma, puede ser incluso útil para recordar o aprender trucos.