Las comarcas leridanas son ideales para la práctica de deportes de aventura y del turismo activo en general, gracias a sus lagos, montañas, ríos caudalosos… líder en ámbitos como la nieve, pero en los últimos años se ha convertido también en un destino consolidado de turismo familiar.
Es un destino con un entorno ideal para viajar y recorrer en familia, ya que ofrece un sinfín de lugares interesantes para conocer y actividades que realizar.
El Valle de Boí y los Valles de Àneu, los primeros territorios leridanos que han obtenido el sello de Turismo Familiar
El Valle de Boí y los Valles de Àneu han sido los primeros territorios leridanos que han obtenido el sello de Turismo Familiar, distinción que otorga la Agencia Catalana de Turismo a los municipios que son especialmente sensibles a este segmento de la demanda y que ofrecen unos equipamientos y servicios adaptados a las necesidades de las familias con niños.
Este destino está formado por cuatro municipios, Esterri d'Àneu, La Guingueta d'Àneu, Alt Àneu y Espot.
Los Valles d’Àneu, en la comarca del Pallars Sobirà, donde destaca el Parque Natural del Alto Pirineo y el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, fueron, en 2013, el primer destino del interior de Cataluña en conseguir el sello de Turismo Familiar, otorgada a los municipios que disponen de establecimientos de alojamiento, restauración y de ocio dirigidos a los más pequeños, cuyo conjunto es reconocido con la otorgación del sello Naturaleza y montaña en familia.
Con un territorio de casi 400 kilómetros cuadrados, los Valles de Àneu disfrutan de este sello de especialización gracias a un entorno natural privilegiado donde se encuentran el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, quizá uno de los enclaves más hermosos, por su majestuoso paisaje y su diversidad de flora y fauna, que sin duda fascinará a los más peques. Además el Parque Natural del Alto Pirineo, y la oferta turística presidida por la estación de Espot Esquí con una gran variedad de actividades para niños, como, rutas adaptadas para familias, hípica, paseos en canoa, senderismo y el festival de teatro infantil 'Esbaiola't', entre otras.
Muy interesante de visitar es El Ecomuseo de los Valles de Àneu, un museo vivo. No se enmarca en un solo edificio sino que está formado por varios elementos monumentales, naturales y etnográficos repartidos por los municipios de Àneu que, en conjunto, explican cómo han vivido los habitantes de estos valles pirenaicos desde finales del siglo XIX. Un proyecto innovador que nace en 1994 y que trabaja en la investigación, conservación, difusión y restitución de la realidad del territorio donde se inscribe.
El centro neurálgico es la Casa Gassia, una típica casa aneuense del siglo XVIII. Mantiene su estructura original y el actual espacio expositivo muestra cómo era la vida doméstica durante la primera mitad del siglo XX. A partir de aquí, el Ecomuseo se extiende por 10 centros patrimoniales más.
Encontramos iglesias - Sant Joan d’Isil, Sant Julià d’Unarre, Sant Pere de Sorpe, Sant Pere del Burgal, Santa Maria d’Àneu y el Conjunto Monumental de Son - que explican cómo era la religiosidad popular, las creencias y los rituales. Y también edificios defensivos tan distantes en el tiempo como el castillo medieval de València d'Àneu y los bunkers de posguerra de la Guingueta d'Àneu. Asimismo, los equipamientos industriales como la serrería hidráulica de Alós y la quesería la Roseta de Gavàs son un testimonio de las actividades económicas de la zona.
Así, a través de los objetos y elementos situados en sus lugares de origen, el Ecomuseo acerca las transformaciones que ha sufrido este territorio en las últimas décadas, y permite relacionar los elementos naturales y monumentales con las tradiciones sociales, culturales y etnográficas.
El Valle de Boí, en la comarca de la Alta Ribagorça, ha conseguido su certificación gracias a un patrimonio natural y cultural privilegiado, con recursos como la estación de esquí de Boí Taüll Resort, el Parque Nacional de Aigüestortes, el conjunto de templos románicos declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad y el balneario de Caldes de Boí, y también por las múltiples actividades derivadas de estos recursos y pensadas para hacer en familia.
La zona cuenta con más de 40 km de caminos señalizados entre sus núcleos de población e itinerarios llanos dentro del parque nacional, mientras que la estación de esquí de Boí Taüll Resort es muy adecuada para aprender a esquiar, con una zona baja adaptada para debutantes y con una zona de trineos y parque de nieve para que los más pequeños disfruten de la nieve.
Los Valles de Àneu, un entorno natural privilegiado donde destaca el Parque Natural de l’Alt Pirineu y el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici
El balneario de Caldes de Boí ofrece servicios pensados para el bienestar de los niños, como las estufas o circuito termal, y el Centro del Románico tiene un espacio interactivo donde los más pequeños aprenden de forma amena cómo apareció el románico, cómo era la sociedad medieval, qué técnicas se utilizaban en la construcción, la decoración de las iglesias, etc.
Actividades para toda la familia
Siguiendo en la zona de los Pirineos de Lérida, en el municipio de Odèn, en la comarca del Solsonès, los visitantes pueden contemplar una cuarentena de especies de aves rapaces y otros animales autóctonos pueden ser contemplados por los visitantes en el Zoo del Pirineo, un centro de exhibición situado en el municipio de Odèn, en el Solsonès, ideal para grupos familiares.
En este centro de exhibición de aves rapaces, que es a la vez centro de educación ambiental, el visitante puede contemplar de cerca una cuarentena de animales autóctonos, básicamente pájaros, pero también mamíferos como el zorro o la marta. El montaje está pensado básicamente para familias con niños y para escuelas, aunque también es interesante para adultos, parejas o grupos de amigos.
El plato fuerte del centro son las exhibiciones de vuelo libre de aves rapaces, de tipo familiar, desarrolladas en un anfiteatro al aire libre enclavado bajo las paredes de Canalda. Otra opción son las visitas guiadas a las instalaciones, con especial atención a los aviarios: el visitante puede acercarse al universo de las aves y conocer algunas de las especies autóctonas del territorio.
El centro organiza también talleres de educación ambiental dirigidos a familias y escuelas, tales como actividades de conocimiento de la flora del territorio, de las plantas medicinales o del rastro que dejan los animales salvajes.
Por su parte, el Rafting Parc La Seu d’Urgell ofrece una serie de paquetes turísticos, muchos de ellos aptos para el público infantil, que combinan rafting y piragüismo con rutas ciclistas por el Alt Urgell y el Parque Natural del Cadí-Moixeró. Además, propone forfaits de aventura con rafting, open kayak, hidrospeed, piragüismo, BTT y rocódromo. También se puede dar un paseo por el canal de aguas tranquilas en una embarcación ecológica de motor eléctrico.
El centro incorporó la temporada pasada una nueva propuesta familiar, los paseos en poni dirigidos a niños y niñas de 4 a 12 años. Los pequeños que toman parte en la actividad van guiados por un familiar o amigo y deben superar un circuito de obstáculos sencillo, en el que también se hacen varias pruebas.
El Valle de Boí tiene recursos como la estación de esquí de Boí Taüll Resort o el Parque Nacional de Aigüestortes
La estación de esquí de Port Ainé, en el Pallars Sobirà, brinda también una amplia oferta de actividades deportivas y lúdicas de alta montaña, muchas de ellas dirigidas a un público familiar. En Port Ainé se puede descubrir el entorno disfrutando al máximo de la naturaleza con la Ruta de descubrimiento del Parque Natural, donde hay dos itinerarios disponibles que se pueden realizar libremente siguiendo los carteles indicativos o por medio del servicio de guías interpretadores del Parque Natural del Alt Pirineu (previa reserva).
Durante la temporada de verano, además, los visitantes pueden recorrer las rutas a pie y en bicicleta. El complejo también abre el Parque lúdico y de aventura, donde los visitantes pueden disfrutar de las pistas de tubbing o practicar senderismo. Hay actividades para los más pequeños, como el miniparque de aventura en los árboles (a partir de los 4 años y hasta 1,30 m de altura), que consta de 10 juegos, como el puente nepalí, redes, un puente colgante y una tirolina, entre otros.
Cabe añadir que en la provincia de Lérida han surgido multitud de iniciativas turísticas dirigidas a toda la familia, como es el caso del Tren de los Lagos, recorrido turístico y paisajístico entre la ciudad de Lérida y La Pobla de Segur orientado básicamente al turismo familiar y los amantes del ferrocarril y de la naturaleza en estado puro.
El servicio, que funciona de abril a principios de noviembre, ofrece un paisaje singular y múltiples posibilidades lúdicas y gastronómicas para los visitantes a lo largo del trayecto por las comarcas del Segrià, la Noguera y el Pallars Jussà.
Para ampliar información www.aralleida.com