Pasarse horas tumbado en la playa, nadar hasta que se arruga la piel, hacer senderismo en entornos naturales o ponerse al límite practicando barranquismo. Dejando a un lado el estrés acumulado durante el año y reponiendo energía de cara a septiembre, estos son algunos de los planes más habituales en los meses de verano y que cada año crean el mismo dilema entre familias, grupos de amigos y parejas: elegir entre unas vacaciones de mar o de montaña.
Pierre & Vacances, cuenta con una variada selección de establecimientos en Andorra y en la costa española para pasar unas vacaciones ya sea bajo el sol o en las alturas de la montaña.
Vacaciones de altos vuelos en el corazón de los Pirineos
No solo de nieve se vive en Andorra. Los amantes de la naturaleza sentirán un flechazo inmediato con los verdes y rocosos paisajes andorranos este verano. En el Principado, se encuentran seis establecimientos en la zona de Grandvalira, entre los que destacan los Apartamentos Andorra Alba el Tarter, Apartamentos Andorra Sunari Peretol y los Apartamentos Bordes d’Envalira.
A 1700 metros de altitud, los recientemente renovados Apartamentos Andorra Alba El Tarter están formados por 20 cómodos estudios de entre 26 y 60 metros cuadrados con capacidad para hasta seis personas. A pocos kilómetros se encuentran el campo de golf de Soldeu, considerado el más elevado de Europa, y el centro termo lúdico de Caldea.
Los Apartamentos Andorra Sunari Peretol están ubicados en el pintoresco pueblo de Bordes d’Envalira, el lugar perfecto para practicar actividades deportivas como ciclismo o senderismo. Sus apartamentos, de uno o dos dormitorios, tienen capacidad para alojar hasta seis personas.
La cantidad de visitas culturales que pueden realizarse desde los Apartamentos Andorra Bordes d’Envalira es envidiable: los viajeros podrán descubrir el museo nacional del automóvil en Encamp; viajar hasta Rusia gracias al singular museo de Matrioskas en Escaldes; o pasearse por el museo de la moto en Canillo. Los alojamientos, estándares o superiores, son espaciosos, con capacidad para ocho personas.
Vacaciones pasadas por agua en Fuerteventura, Málaga y Tarragona
La idea de pasar unas vacaciones sin preocupaciones entre el agua y la arena es tentadora para muchos. Pierre & Vacances en España goza de una larga tradición costera y tiene en su portfolio más de una veintena de establecimientos a orillas del Mediterráneo o del Océano Atlántico. Pierre & Vacances Fuerteventura Origo Mare, Pierre & Vacances Terrazas Costa del Sol y Pierre & Vacances Bonavista de Bonmont son los tres resorts de la compañía donde el verano se vive en pleno esplendor. Este tipo de establecimientos se caracteriza por su idoneidad para alojar a un público familiar, dado que está compuesto por apartamentos o villas de dos a ocho personas y ofrece una amplia gama de propuestas de restauración y clubes para niños y adolescentes desde 4 hasta 17 años.
Las agradables temperaturas de la comunidad canaria y la conjugación de paisajes volcánicos y de playa hacen de Pierre & Vacances Fuerteventura Origo Mare una opción irresistible para este verano. El resort ha destinado más de 1000 metros cuadrados a zonas acuáticas con piscina de olas y toboganes, y dispone también de una base Yolo Riders para iniciarse en el mundo de los deportes náuticos como el surf o la vela.
Una estancia en Pierre & Vacances Terrazas Costa del Sol, en Manilva, tiene todos los ingredientes para descubrir la auténtica esencia andaluza en un ambiente acogedor y familiar. El espacio acuático, tan espléndido como necesario en estas fechas, cuenta con dos piscinas exteriores que juntas suman más de 500 metros cuadrados, chorros de masaje, piscina infantil y múltiples espacios verdes.
La Costa Dorada es una de las zonas con más encanto de España, y Pierre & Vacances Bonavista de Bonmont, situado en un entorno natural protegido, brinda la oportunidad de experimentarla en primera persona. Ya sea descansando en la playa de Miami Platja o en el espacio acuático de 400 metros cuadrados del resort, unas vacaciones en este paraje están llamadas a ser la máxima expresión de un verano al sol.