Nueva York es un lugar que todo viajero debe visitar alguna vez en la vida. Una metrópolis que se ha convertido en un auténtico icono turístico a lo largo del tiempo. Conocida como la ciudad que nunca duerme, su ambiente cosmopolita y su diversidad cultural atrapa a los turistas en un paisaje urbano propio de las mejores películas estadounidenses. La capital del mundo se ha establecido como uno de los destinos predilectos para millones de personas que cada año deciden sumergirse unos días en su ritmo de vida frenético. En esta ocasión hemos preparado una guía de Nueva York con siete lugares mágicos para conocer la ciudad neoyorquina durante una semana.
La plaza más famosa del mundo se encuentra en Nueva York. Situada en el cruce de Broadway y la Séptima Avenida, Times Square es el corazón de la ciudad y uno de los lugares más icónicos para los turistas. La luminosidad de la avenida con los imponentes anuncios publicitarios expuestos en pantallas gigantes es una de las postales más representativas de las películas y series ambientas en la metrópolis neoyorquina. Un espacio con una gran aglomeración de personas y que cuenta con un sinfín de atracciones entre las que destacan las obras de teatro y los musicales.
La Estatua de la Libertad es uno de los emblemas de Nueva York. Situada en Liberty Island, este monumento fue un regalo de Francia para conmemorar los 100 años de la Declaración de Independencia de Estados Unidos. Se trata de un lugar imprescindible en cualquier visita a la ciudad neoyorquina, La opción más recomendada a la hora de visitarla es cruzar a la isla cogiendo algunos de los ferries de la compañía Statue Cruises.
En la ciudad de los rascacielos no puede faltar la visita a uno de los edificios más altos y emblemáticos de Nueva York, el Empire State. Sus dos observatorios, ubicados en el piso 82 y en el piso 102, ofrecen unas vistas panorámicas únicas de la metrópolis. Uno de los lugares más visitados por los turistas que siempre cuenta con colas interminables, por ello es aconsejable adquirir las entradas con antelación antes de realizar la visita.
Este parque público de 4 kilómetros de longitud fue inaugurado en 1857 y es un oasis de naturaleza en pleno centro de Manhattan. Un lugar que otorga una gran tranquilidad tras varios días respirando el caótico ritmo de vida de la ciudad neoyorquina. Un paisaje mágico rodeado de rascacielos perfecto para recorrerlo a pie y disfrutar durante un día completo de su ambiente.
El Rockefeller Center es una de las mejores opciones para aquellos turistas que prefieran disfrutar de las vistas de Central Park desde las alturas. En este famoso rascacielos se encuentra uno de los mejores miradores de la ciudad, el Top of the Rock. Este observatorio ubicado entre las plantas 67 y 70 ofrece unas vistas panorámicas espectaculares de Manhattan, siendo una alternativa perfecta y complementaria de las que se pueden obtener desde el Empire State.
Museo de Arte Moderno de Nueva York
Inaugurado el 7 de noviembre de 1929, este museo cuenta con una de las colecciones arte moderno y contemporáneo más importantes del mundo. Su exhibición permanente cuenta con más de cien mil piezas entre las que destacan ‘La noche estrellada’ de Vincent Van Gogh o ‘Las señoritas de Avignon’ de Pablo Picasso.
El puente de Brooklyn es otros de los símbolos cinematográficos más representativos de Nueva York. El puente une los distritos de Manhattan y Brooklyn a través de sus casi 2 kilómetros de extensión atravesando el East River. Su plataforma peatonal garantiza a los turistas un paseo inolvidable mientras sacan algunas de las mejores fotografías de la ciudad.