TURISMO NACIONAL

Ferrol impulsará el Camino Inglés entre los turistas británicos

Redacción | Viernes 28 de abril de 2017

Durante todo el mes de abril, el Puerto de Ferrol ha recibido a cerca de 4.000 pasajeros que han llegado a la ciudad a bordo de los cruceros Balmoral y Oriana. La Sociedad Mixta de Turismo de Ferrol, interesada en promover el Camino Inglés entre los turistas británicos, ha contratado a varios informadores bilingües inglés-español que expliquen a los cruceristas los orígenes y el recorrido del Camino Inglés, que parte precisamente de Ferrol. Paralelamente a esta acción, el 22 de abril se celebró el evento, promovido por la Diputación de A Coruña, ‘Primavera no Camiño Inglés’ que reunió a representantes de los 18 Concellos por los que pasa el Camino, ofreciendo actuaciones musicales, showcookings y degustaciones gratuitas de productos como la cerveza artesanal ‘la ferrolana’.

La ruta de peregrinación más antigua de Europa –El Camino de Santiago- recibe a más de 300.000 personas al año que realizan el camino a pie, en bicicleta o a caballo siguiendo cualquiera de los doce trayectos que culminan en la ciudad compostelana. Según las últimas estadísticas aportadas por la Oficina del Peregrino, 9.247 personas recorrieron el Camino Inglés, un 93,92% de las cuales habían partido desde Ferrol.

Una de las principales rutas de peregrinación jacobea es la conocida como Camino Inglés, preferida por los peregrinos procedentes del norte y oeste de Europa que venían en barco hasta la costa coruñesa y continuaban por tierra hasta llegar a Santiago de Compostela. Aquellos que optaban por este itinerario, no solo evitaban a los asaltantes sino que también reducían el viaje a unas tres semanas entre la ida y la vuelta. Aunque este recorrido alcanzó su auge en el siglo XV, los desembarcos más numerosos coincidieron con los años 1428, 1434 y 1445, según la documentación de la época.

El Camino Inglés actual ofrece dos alternativas; la que parte desde Ferrol y recorre 118 kilómetros y una más corta que sale desde A Coruña y recorre solo 74. Ambos trayectos se unen en la pequeña aldea de Bruma, convirtiéndose en un único camino hasta llegar a la tumba del Apóstol. Un dato a tener en cuenta por quien esté interesado en conseguir la Compostela es que para obtener dicha credencial, es indispensable demostrar que se han recorrido al menos 100 kilómetros a pie.

Desde Ferrol, el peregrino descubre su ría y la espectacular reserva de la biosfera de As Mariñas Coruñesas, además de cruzar la desembocadura de los ríos Xubia, Eume, Lambre y Mandeo ya en Betanzos, rodeado de un paisaje que permite al caminante disfrutar del litoral gallego con interesantes tramos rurales de gran belleza. Desde 2017, el Puerto de Ferrol, cuenta en el mismo Km. 0 con una Oficina de Atención al Peregrino que abre todos los días del año y hace también las veces de Oficina de turismo.

Para más información los interesados pueden consultar la web: http://www.caminodesantiago.gal/es/planifica/las-rutas/camino-ingles en la que se ofrece el mapa del trazado del camino desde Ferrol, la distancia a recorrer y la dificultad del itinerario.

Bien señalizado con flechas amarillas y los clásicos mojones de piedra con vieira e indicador de distancia, el Camino Inglés cuenta con todo tipo de servicios y 34 albergues a lo largo de todo su trazado. Algunos de los lugares de visita obligada son el Espacio Natural Protegido de Monte Xalo en Culleredo, las fragas del río Eume en Pontedeume, el Monte de Ancos en Neda, además de multitud de vestigios arqueológicos como el Castro de Elviña en A Coruña, el de Viladonelle en Neda, o los Yacimientos de Santa Comba en Ferrol.

Una experiencia única que propone conocer Ferrol desde una perspectiva diferente, permitiendo al peregrino disfrutar de la costa y adentrarse en los pueblos más bonitos del interior de la provincia, aprovechando para respirar aire puro, abstraerse y desconectar. Por su parte, la Sociedad Mixta de Turismo de Ferrol aprovechará la llegada de unos 21.000 cruceristas hasta agosto para dar a conocer esta singular ruta entre los turistas británicos con el objetivo de que lo difundan a posteriori entre sus familiares y amigos al retornar a sus países de origen.

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