Hasta el 26 de marzo en el Palacio de Versalles se ofrece una exposición que presenta la variedad infinita de entretenimiento y el ingenio de la Corte…
…que hizo de Versalles un lugar de fiestas y espectáculos a la vez que lo convertía en un sitio para más grandeza, extraordinario y fantástico. Se navegará por tres reinos, desde Luis XIV a la Revolución… Si bien no es una exposición exhaustiva, es una manera de entender la importancia que se le ha dado al entretenimiento en la corte a través de los siglos.
En sus memorias para la educación del delfín, Louis XIV da gran importancia a las celebraciones y al entretenimiento, que, según él, forman parte del arte de gobernar. Es necesario para la vida ordinaria de la corte, establecer "la sociedad del placer, que da a las personas de la Corte familiaridad con el Soberano, les conmueve y les encanta más de lo que dicen y aparentan". Dependiendo de sus gustos y tendencias de la moda, cada uno de los sucesores del gran Rey mantiene esta tradición del lujo y la creatividad.
El reto es presentar la infinita variedad e inventiva de entretenimientos que se ofrecen a la Corte, ya fuesen para disfrute exclusivo del monarca o para los cortesanos. Estos no son, por supuesto, todas las formas de entretenimiento público, comedia, ópera, conciertos, luces e iluminaciones, sino también actuaciones privadas cuando los señores y damas de la Corte suben ellos mismos a las tablas. Existían innumerables juegos de azar y actividades físicas donde se tenía que brillar: la caza, los bailes y mascaradas…
A lo largo de la exposición, se invita al público a descubrir y sentir lo que vivió el cortesano, y se apoya en representaciones visuales, imágenes en 3D y puestas en escena que invitan a los visitantes a redescubrir la atmósfera de los lugares, algunos de los cuales ya han desaparecido, e imaginar lo que sería estar en la corte del Rey de Francia…