La cuarta edición de Y Quién Necesita Broadway llegó a su fin el domingo, día 1 de mayo, y el Complejo Cultural Teatro de Zafra subió el telón, por última vez, para entregar los Premios Z de Teatro Musical a las mejores participaciones.
Cuatro enormes letras gigantes, al más puro estilo Broadway, presidían el escenario, donde se desarrollo una gala, creada de forma exclusiva para la ocasión, repleta de música, sorpresas, humor y emoción y un tono reivindicativo ante el reclamo de los musicales americanos que aún no han llegado a España y que los seguidores del teatro musical están deseando ver sobre los escenarios.
Todos sus nominados, publicados días antes en las redes sociales del certamen, acudían a la cita engalanados para la ocasión: no fueron pocas las pajaritas y lentejuelas que se dejaron ver por la alfombra roja.
La ceremonia de entrega de los Premios Z de Teatro Musical arrancó con la solemne voz de la cantante sevillana Patricia Pérez Berbel. La joven interpretó Somewhere over the rainbow sin ningún acompañamiento provocando la emoción de todos los espectadores. Una emoción que volvió a despertar, minutos más tardes, de la mano de su hermana, Miriam Pérez Berbel, con una letra del musical Wicked.
La pequeña tienda de los horrores’, de la ESAD de Murcia, se alzó con el Premio Oris Sonrisa y Cultura al Mejor Espectáculo, dotado de mil euros
El primer Premio Z de Teatro Musical, a la Mejor Actriz, fue a parar a manos de Milagros Muñoz, por su papel en Viento del Este. La gaditana recibió el galardón de manos del distinguido actor extremeño Domingo Cruz, que también entregó el del Mejor Actor a Mario Salas de Rueda, también de Teatro Dioniso. La versión que proponía esta compañía de Jerez de la Frontera cosechó cuatro Z más: al Mejor Decorado, que recayó en Manuel Calle; al Mejor Vestuario, para Toñi Carles; al Mejor Sonido, gracias a Javier Curtido; y el Premio Especial del Público, fallado por los distintos asistentes a las representaciones que votaron a través de un sistema de puntuación anónima.
Humor y emoción con Plétora Teatro
Como en sus anteriores ediciones, la ceremonia estuvo conducida por el grupo placentino Plétora Teatro que presentó una amplia variedad de números musicales. Entre ellos, destacó un enfrentamiento entre los géneros de la tragedia y la comedia y el opening de la gala, acompañados por las chicas de la Escuela Duende, dirigidas por Santi Méndez. Las de la Escuela de Danza Clásica de Zafra tampoco faltaron a la cita que, bajo la dirección de Cinthia Pérez, hicieron un homenaje a esta disciplina, tan importante en los musicales, dos días después de conmemorar el Día Internacional de la Danza.
Viento del Este’, de Teatro Dioniso, fue la gran ganadora de la noche con seis Premios Z, entre ellos el Premio Especial del Público
Entre los entregadores, se distinguían distintos profesionales de las artes escénicas extremeñas, entre ellos la autora y directora teatral Concha
Rodríguez o el gerente del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, Pedro Blanco. Éste último fue el encargado de entregar el Premio Z a la Mejor Dirección, que recayó en José Antonio Sánchez por La pequeña tienda de los horrores. Los chicos de la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) de Murcia también se llevaron el galardón a la Mejor Voz Masculina, fallado en Antonio Buendía, y el Premio Oris Sonrisa y Cultura al Mejor Espectáculo, patrocinado por la Clínica Dental Oris y dotado de mil euros.
La joven compañía de butaca, llegada desde Pamplona, se llevó el Premio Z a la Mejor Iluminación por su versión de Grease mientras que la ESAD de Sevilla se alzó con tres Premios Z de Teatro Musical. Soraya Estévez consiguió el de la Mejor Voz Femenina, Mónica Rengel el de la Mejor Dirección Musical y Marió Payánel de la Mejor Coreografía.
La gala, creada de forma exclusiva para la ocasión, estuvo repleta de música, sorpresas, humor y emoción y alguna que otra reivindicación por los musicales americanos que aún no han llegado a España y que los seguidores del teatro musical están deseando ver sobre los escenarios.