Después de todo, este fantástico dispositivo pone el mundo en la palma de la mano, permitiendo la conexión instantánea con personas, información, entretenimiento y mucho más.
Por eso no es de extrañar que nuestros teléfonos siempre estén a nuestro lado.
Pero aunque pueda PENSAR que su teléfono inteligente le hace MÁS INTELIGENTE… la investigación demuestra TODO lo contrario.
Perdiendo el enfoque
¿Le ha sucedido esto? Está leyendo un buen libro... almorzando con un querido amigo... o disfrutando de una velada romántica… pero un pensamiento sigue apareciendo en su cabeza: “¿Qué me estaré perdiendo?”
Así que levanta el móvil y lo comprueba. Una vez, dos o cada pocos minutos.
Piénselo bien. Poner el foco en su teléfono le distrae de concentrarse en QUÉ está haciendo y con QUIÉN lo está haciendo en ese momento.
Y quienes están compartiendo ese rato con nosotros posiblemente no se sientan muy felices ante nuestra actitud.
Pero un estudio publicado en Journal of the Association for Consumer Research reveló que eso ni siquiera es lo PEOR de este pequeño y desagradable hábito.
Porque simplemente pensar en su teléfono puede PERJUDICAR la cognición... una reducción de la capacidad intelectual que los investigadores llamaron “fuga de cerebros”.
Los participantes del estudio fueron sometidos a una serie de pruebas de palabras y matemáticas. Mientras tanto, sus teléfonos permanecían en sus escritorios, en sus bolsillos o carteras, o en la habitación de al lado.
Resulta que cuanto MÁS LEJOS estaba el teléfono, MÁS ALTAS fueron sus puntuaciones.
Para que quede claro, ninguno consultó sus teléfonos, pero su MERA PRESENCIA redujo la disponibilidad de los participantes y capacidad cognitiva.
Es decir, que tenerlos más cerca afectó a su desempeño en la tarea en cuestión y disminuyó la capacidad intelectual que los participantes podían utilizar para otras tareas.
De hecho, el estudio también encontró que aquellos prácticamente adictos a sus teléfonos experimentaron la PEOR fuga de cerebros de todas.
Porque cuanto MAYOR es la dependencia del teléfono, MENOS recursos cognitivos se dejan disponibles para cualquier otra cosa.
Fuera de la vista, fuera de la mente
Amigo, SABEMOS que los teléfonos móviles pueden ser peligrosos o incluso poner en peligro la vida.
De hecho, cada vez hay más pruebas de que los dañinos campos electromagnéticos (CEM) que emiten están relacionados con una amplia gama de problemas de salud.
Pero como descubrió este estudio, simplemente PENSAR en su teléfono puede pasar factura.
Así que mi mejor consejo es DESCONECTAR de su teléfono... y RECONECTARSE con su vida.
Le sorprenderá lo que SE PIERDE cuando concentra sus pensamientos y atención en una pantalla pequeña.
Sin embargo, soy realista... y sé que renunciar al teléfono probablemente esté fuera de discusión.
Pero PUEDE mejorar su salud (y sus relaciones) con unos simples cambios.
¿Todavía es demasiado? Al menos manténgalo apagado tanto como sea posible.
Eso no solo le impedirá echar un vistazo de vez en cuando al móvil, sino que también le ayudará a protegerse de los peligrosos campos electromagnéticos.
(Extraído de https://www.saludnutricionbienestar.com/)