Recién estrenado el verano, se acercan las ansiadas vacaciones. Broncearnos en la playa, desconectar en la tranquilidad del campo o conocer esos lugares que siempre hemos querido visitar son algunas de las opciones que solemos tener en cuenta antes de organizarlas. Pero, ¿por qué no una ruta en barco? Aunque la navegación se asocia con un alto poder adquisitivo, gracias a empresas como SamBoat, en el sector del alquiler de barcos para particulares, unas vacaciones en barco se hacen mucho más asequibles.
En la península, rodeada en un 75% por mar, contamos con gran variedad de opciones para conocer diferentes tipos de costas y paisajes. De un tiempo a esta parte Portugal se ha convertido en uno de los destinos favoritos de europeos y, también, de los españoles. Y es que, el país luso acoge algunas de las costas y playas más bonitas del continente con rincones y rutas muy atractivos tanto para los amantes del mar como para quienes, simplemente, deseen conocer este bonito país de una manera diferente.
El Algarve, al sur de Portugal, es reconocido por tener algunas de las costas más impresionantes de Europa y la mejor manera de descubrir sus cuevas y calas escondidas es en un viaje en barco. Una opción muy refrescante ya que las temperaturas en tierra pueden ser muy altas durante la temporada más turística, que es julio y agosto. Además el mar suele estar en calma lo que hace muy agradable la navegación.
Inicia tu viaje en barco al país vecino desde cualquiera de los puertos españoles del sur de la península. Los más cercanos están situados en las zonas costeras de Huelva o Cádiz. El mismo Puerto de Cádiz es una opción, pero Punta Umbría, Mazagón o Isla Cristina, en Huelva, serían los más cercanos a la costa sur de Portugal. Antes de partir, consulta en la web de SamBoat cuáles serían las ofertas de barcos de alquiler que más te interesen para comenzar la ruta y planifica el trayecto. De motor, velero, semirrígida y catamarán, con o sin patrón, son las opciones que barajan desde este servicio.
SamBoat te propone algunas de las visitas obligadas del Algarve; lugares de ensueño para recorrer en barco y disfrutar, entre otros atractivos, de las cuevas, del avistamiento de delfines y de sus costas
Navegar desde Albufeira hacia la costa rocosa que rodea Carvoeiro y Benagil es la ruta ideal para descubrir nuevas playas o lugares para visitar sin perderte los impresionantes paisajes que brinda la costa portuguesa.
Las posibilidades son infinitas: Visitar el casco antiguo de Albufeira; El Mirador do Pau da Bandeira o playas como la de los Pescadores; la playa de Los Alemanes o la de María Luisa.
Lagos es uno de los destinos turísticos más populares de Portugal, una ciudad histórica y fascinante situada en la pintoresca costa del Algarve Occidental, que, aún así, no ha sucumbido al turismo de masas. Es un destino con una dilatada tradición marinera, playas inmaculadas y auténtico carácter portugués.
El puerto de Lagos es un punto ideal para comenzar el viaje por la costa del Algarve con la visita de la cueva natural Ponta de Piedade.
Cuevas de Benagil
Se trata de una de las cuevas más famosas del Algarve y una de las visitas obligadas. Las cuevas de Benagil cuentan con un techo abierto que atrae cascadas de luz convirtiéndola así en un espectáculo natural digno de ver. Es, en realidad, una cala muy pequeña donde además de visitar la famosa cueva, existe la opción de realizar diferentes actividades acuáticas.
Situada cerca del pueblo de Carvoeiro, es una playa pequeña y de difícil acceso por lo que es ideal para acceder en barco. En ella se puede fondear fácilmente ya que las pequeñas bahías la protegen de las olas. Es un sitio ideal para relajarse y disfrutar de un espectacular paisaje adornado de acantilados y playas vírgenes. La playa es bastante estrecha por lo que cuando sube la marea puede incluso llegar a desaparecer bajo las olas.
Es una de las playas más hermosas y visitadas del Algarve. De arena blanca y rodeada de rocas de un bonito color rojizo y exuberante vegetación, es un paisaje absolutamente único. Cerca de ella todavía se pueden encontrar pequeñas calas y playas más tranquilas escondidas entre rocas de piedra caliza, ideales para los que quieren escapar de la multitud que se concentra en Praia da Rocha en los meses de verano.