Historia, cultura y arquitectura se mezclan en los parajes de Valonia, que más allá de sus preciosos colores primaverales, están 'salpicados' por un sinfín de monumentos que guardan grandes legados del pasado.
La región francófona de Bélgica es un escenario idóneo para los amantes de la historia y la cultura durante todo el año. Aprovechando la celebración del Día de los Monumentos, (18 de mayo), Turismo de Valonia destaca algunos de los monumentos que son arquitectónicamente más impresionantes:
El Memorial Mardasson (Bastoña)
Un emotivo monumento dedicado a los soldados estadounidenses que lucharon en la Batalla de las Ardenas durante la Segunda Guerra Mundial. Tiene un diseño arquitectónico impresionante, que se fusiona con un entorno tranquilo y silencioso, que lo convierten en un lugar de reflexión y recuerdo de este episodio histórico.
Colegiata Saint Gertrude (Nivelles)
Es una joya arquitectónica románico otoniano y uno de los principales testimonios de la historia religiosa de Valonia. Su impresionante fachada y sus vidrieras de colores son el principal reclamo de los visitantes, que, en dicho monumento pueden explorar su rica herencia cultural.
Una fortaleza imponente ubicada en la cima de una colina, la Ciudadela de Namur ofrece vistas panorámicas de la ciudad y sus alrededores. Con una historia que se remonta a los tiempos romanos, esta fortaleza es un testimonio del pasado militar de Valonia. Los visitantes pueden explorar sus túneles subterráneos, admirar las murallas fortificadas y disfrutar de eventos culturales que se celebran en su interior.
En este emblemático paraje, que es un antiguo campo de batalla, se encuentra el monumento del León de Waterloo, un tributo a los valientes soldados que participaron en la famosa Batalla de Waterloo. Los visitantes pueden subir hasta la cima de la colina para disfrutar de una vista panorámica y aprender más sobre este decisivo episodio de la historia europea en el centro de visitantes adyacente.
Estación Ferroviaria de Lieja-Guillemins (Lieja)
Un prodigio arquitectónico moderno, la Estación Ferroviaria de Lieja-Guillemins es una obra maestra del famoso arquitecto español Santiago Calatrava. Con su diseño vanguardista y su impresionante estructura de acero y vidrio, han convertido en un hito emblemático de Lieja y de Bélgica.