Finnair ha adquirido 750 toneladas de combustible de aviación sostenible a Neste como parte de las iniciativas que la aerolínea lleva a cabo para lograr su objetivo de alcanzar la neutralidad en carbono en el año 2045. Se trata del mayor lote individual de este tipo de combustible (SAF por sus siglas en inglés) comprado por Finnair hasta la fecha, equivalente a unos 400 vuelos cubriendo la distancia entre Helsinki y Estocolmo utilizando 100% SAF sin mezcla.
”Finnair celebra este año su centenario y reducir las emisiones de los vuelos es esencial para un futuro sostenible. El uso de SAF es una de las herramientas más importantes para conseguirlo, y también queremos involucrar a nuestros pasajeros, por lo que una pequeña parte de cada billete de avión vendido se destina al coste de combustible de aviación combustible”, asegura Eveliina Huurre, responsable de sostenibilidad de Finnair. ”Los clientes también pueden contribuir con nuestro servicio de compensación de carbono, que combina compras de SAF y proyectos de compensación certificados”, añade.
El uso de SAF reduce las emisiones de gases de efecto invernadero hasta en un 80% durante su ciclo de vida en comparación con el uso de combustible fósil para aviones. El combustible de aviación sostenible de Neste MY se produce a partir de residuos y materias primas residuales 100 % renovables, como el aceite de cocina usado y los residuos de grasa animal. Finnair está comprometida con el objetivo de la alianza oneworld de utilizar un 10 % de combustible de aviación sostenible en 2030 y también participará en las adquisiciones conjuntas de este combustible prevista por oneworld entre 2025 y 2032.
“Finnair fue una de las primeras aerolíneas en utilizar nuestro combustible de aviación sostenible y es estupendo comprobar que sigui desempeñando un papel activo en la creación de un futuro más sostenible para la aviación adquiriendo nuestro SAF”, comenta Jonathan Wood, vicepresidente de desarrollo técnico y aviación renovable en Neste. Con sede central en Finlandia, Neste tiene el objetivo de alcanzar la reducción de 20 millones de toneladas anuales de gases de efecto invernadero en el año 2030 con sus soluciones renovables.