Uno de los activos históricamente más seguros y que ofrece tradicionalmente buenas opciones de rentabilidad es el oro. Y es que esta opción, asegura Raquel Herrero, analista de operaciones con metales preciosos de Coininvest, “es muy interesante a la hora de diversificar, sobre todo cuando uno no sabe dónde hacerlo. El oro se ha comportado como el metal refugio contra la inflación. Suele adaptarse muy bien, manteniendo un valor razonablemente estable, cuando atravesamos contextos cambiantes y hay una situación inestable. Es cierto que no ofrece rentabilidad inmediata, pero ha demostrado ser una buena opción a largo plazo”.
El entorno, clave de cara a invertir
El oro, como todos los metales preciosos, es una inversión de perfil más conservador, pero a la vez más estable, describe la experta: “Hay que tener en cuenta que éste no se dedica solo a inversión - a ello se dedica un 8% aproximadamente-, sino se destina a joyería principalmente, y de manera muy importante también a tecnología, entre otros sectores”.
En este sentido, pronostica, “de momento la reserva federal americana ha mantenido los tipos de interés algo al alta, con lo que parece el dólar puede seguir también alto frente al euro, lo que provoca que la demanda baje un poco y con ello el valor de cotización del metal, pero el valor de cotización del oro depende de muchos factores, tales como como la situación geopolítica y las compras de oro de los bancos centrales de los países, por ejemplo”.