Los Geoparques Españoles de la UNESCO valoran muy positivamente el programa que se ha llevado a cabo en la isla con el desarrollo de las jornadas "Últimas erupciones en Canarias: El Hierro 2011-La Palma 2021", organizadas por Geoparque Mundial de la Unesco El Hierro
Vivir en una isla volcánica es habitar en un territorio vivo. Esto es algo que siempre han tenido claro los canarios. Pero sin duda esta frase tomó un sentido muy diferente tras el episodio submarino al que asistimos en octubre de 2011. Y se volvió aún más evidente tras la erupción del volcán de La Palma en 2021.
Precisamente para hablar ambos procesos eruptivos, se dieron cita durante el pasado fin de semana cuatro científicos que vivieron las dos erupciones y narraron cómo la experiencia de El Hierro fue decisiva para el modo en que se gestionó la de La Palma.
“Hasta la erupción de El Hierro, no habíamos vivido de cerca lo que significa la gestión de un fenómeno de este tipo, no sólo en el sentido científico y de la investigación sino también de la gestión de la emergencia. Aprendimos, por ejemplo, que cada científico puede tener una opinión, pero que la que se lanza a los medios de comunicación debe ser consensuada. Lo contrario provoca desconfianza y más incertidumbre entre la población”, explicaba María José Blanco, jefa de la vigilancia científica del Instituto Geográfico Nacional, y encargada de abrir las ponencias de estas Jornadas.
Eleazar Padrón, Jefe de la Unidad Funcional de Geoquímica del INVOLCAN e Investigador TORRES QUEVEDO del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), explicó en su ponencia cómo, a través de la monitorización de los gases, se puede no sólo analizar lo que está ocurriendo sino predecir el curso que toman los procesos eruptivos.
La parte marina corrió a cargo del geólogo marino Juan Tomás Vázquez, del Instituto Español de Oceanografía, quien relató todo lo sucedido bajo el mar frente al pueblo de La Restinga en el año 2011 y como se vivió la llegada al mar de las coladas del volcán de La Palma en 2021.
Por último, el geocientífico del geoparque El Hierro, Ramón Casillas, hizo una comparativa general de ambas erupciones y mostró vídeos e imágenes de ambas que él mismo había grabado mientras trabajaba y que sin duda quedarán en la memoria de todos los asistentes por lo espectacular y cercano de las mismas.
Las tardes se reservaron para actividades de reconocimiento de la geología de la isla, y de aquellos valores que han hecho que sea parte de la Red Mundial de Geoparques desde el año 2014. Parada obligatoria fue el Centro de Interpretación del Geoparque, donde las Restingolitas se convirtieron en auténticas protagonistas.
A lo largo de dos senderos descubrieron diferentes formaciones geológicas como son las lavas cordadas y las “aa”, los hornitos, los tubos volcánicos, los túmulos o los tres megadeslizamientos de la isla. De este modo, representantes de prácticamente todos los Geoparques Españoles caminaron por los Lajiales de La Restinga, observaron ejemplos de disyunción columnar tanto desde tierra como desde el mar, recorrieron el sendero geológico de La Maceta a Las Puntas y aprendieron de primera mano, y gracias al Consejo Regulador de Denominación de Origen de Vinos de El Hierro, el carácter que el suelo volcánico añade a los productos de la tierra.