El músico, compositor, productor y DJ CARLOS JEAN, es como el mismo se define: "un culo inquieto" y en estos momentos está girando, produciendo a otros artistas, componiendo para él y para otros, y con un nuevo proyecto, "Sol House Music Project", para unir música y turismo...
Entre tanto lio, Carlos Jean, ha tenido tiempo para atender a INOUT VIAJES:
¿Cómo te metiste en este invento de Sol House?
- Nos conocíamos del mundo del marketing y de la músia. Era DJ Residente del Hotel Sol Wave House de Magaluf y también estuve en otros hoteles de la cadena. La idea surgió de encontrar esos momentos... por ejemplo, cuando estaba en el Me de Ibiza y en el desayuno veía al DJ y pensaba "éste es el momento"... Todo surgió el año pasado...
Carlos Jean vive la música con pasión, la vida con alegría y transmite buen rollo, por eso lo eligió Sol House, y con la intención de quitar muchas de las connotaciones negativas que arrastra la noche:
-Efectivamente pasan cosas- reconoce Carlos Jean- pero también pasan cosas en Madrid. Al principio fue... como decirlo... leía los periódicos, las informaciones, te meten un poco de miedo y piensas "ostras, a qué sitio voy a pinchar", pero una vez allí... en la zona en la que estábamos era muy tranquilo...
Pero él tiene otros proyectos, tiene su historia musical, su producción...
¿Has dejado todo lo demás?
-No, no. Soy un culo inquieto en la música y no puedo parar. Acabo de terminar el nuevo disco de Bebe, estoy en la mitad del disco de Najwajean, que sacaremos en octubre...
Bebe llevaba tres años sin sacar nuevo trabajo, desde que a principios de 2012, hiciese "Un pokito de rocanrol" (el único que no fue producido por Carlos Jean), y será su cuarto disco. Y Najwajean es el proyecto musical que nació hace unos años, y era (es o vuelve a ser) el dúo formado por la actriz y cantante Najwa Nimri y el propio Carlos Jean. Con esta formación editó "No Blood", en 1998, "Selection" (2002), "Ten years after" (2007) y "Till it breaks" (2008). Najwajean se presenta en Madrid, dentro de los Veranos de la Villa, y lo hará con temas de ese nuevo disco del que habla Carlos Jean, será el 29 de julio, en el Circo Price…
-También estoy con gira, pero estoy muy involucrado en este proyecto de los hoteles, sobre todo ahora que estamos en todo el mogollón...Y es que viene mucho trabajo porque cuando das oportunidades a la gente para trabajar y hacerlo en el sitio que mola, ser DJ en el hotel que mola en verano, pues llegan un aluvión de propuestas y son complicadas de escuchar, porque cuando hice el "Plan B" (el "Plan B" de Carlos Jean era un proyecto nacido y basado en internet, con la colaboración entre músicos e improvisaciones que se iban añadiendo y fue un gran éxito), escuchabas un trocito de una canción y ya sabías de que iba. Ahora tienes que escuchar la selección musical de los chicos, qué hacen, qué preparan los DJs, cómo ven el desayuno, cómo ven la siesta, cómo ven el preparty...
Y es que, el punto fuerte del proyecto Sol House es la creación de nuevos puestos de DJ Residente durante la temporada de verano, y los elegidos se incorporarán en los hoteles a partir del 15 de junio.
-Y hemos pedido quince minutos grabados en video, quince minutos, divididos en tres momentos de cinco minutos, y aunque en cinco minutos se puede ver poco, pero con tres movimientos que haga el DJ y tres canciones que elija, más o menos sabemos de qué va, que actitud tiene, que rollo lleva a la hora de pinchar, porque al final lo que vas a hacer es poner música en un hotel durante todo el día y lo que no puede ocurrir es que un cliente te diga: "mira chaval, que me estás machacando", por eso buscamos a la persona que sepa manejar este asunto perfectamente...
¿Este va a ser tu verano?
-Parte... porque cuando termine de escuchar las propuestas, están las listas musicales, que se van a ir moviendo, con los DJs que elijamos... Las listas, ese es el tema, que las listas hay que moverlas, hay que saber lo que quiere escuchar la gente...
En efecto, Carlos Jean ha creado tres playlists de cada uno de los momentos (Desayuno, Siesta y Pre-party) que se escucharan en los hoteles. Se intenta, también que el público pueda crear sus propias listas de cada uno de esos momentos… Y es que es un proyecto que empieza ahora y tiene que madurar y en un futuro se verá cómo evoluciona...
¿Dejas tu faceta de descubrir nuevos valores, de investigar nuevos caminos?...
-No, pero eso ahora no está al frente... ahora estoy con el proyecto de Sol House y los DJs Residentes...
Pero, diga lo que diga, Carlos Jean sigue investigando, buscando nuevas fórmulas, emociones...
-Es que hablar de música es muy complicado, es como bailar sobre arquitectura, como dijo Zappa, pero la música que se escucha en un supermercado, en un centro comercial, no está estudiada para que tengas bienestar, está estudiada para el comportamiento de la gente... (se sobreentiende lo que quiere decir) porque muchas veces la música se mal utiliza... la que se oye en el ascensor o en los aviones, que es el momento que más nervioso estás, y en vez de tranquilizarnos ponen una música que cada vez nos pone más nerviosos... estas cosas hay que cuidarlas...
Y hablando de experimentos y de cuidar las cosas de la música, llegamos a las silent party, fiestas en las que todos los participantes llevan cascos para escuchar la música, sin que exteriormente se escuche nada, pero quizás a esas fiestas les falta ¿alma? ¿pasión?...
-El tema de los cascos... vivimos todo el día metidos en el móvil, en el ordenador, en la tablet... y justo lo que necesitamos es aire, piel y tocarnos y sentir que estamos ahí y precisamente esas fiestas no lo hacen... puedes experimentar mucho y ver lo que pasa... pero al final...hay cosas inexplicables… y yo me dedico a pinchar y estás conectado con el público de alguna manera, parece que pones lo que te están pidiendo, es como un poco automático...
Tiene que existir comunión, interacción, aunque hay DJs que van a su bola, por así decirlo...
-El que agacha mucho la cabeza y es un poco… avestruz… intentando llamar la atención, pero yo que estuve en los jesuitas, que me decían siempre “entra con la suya para salirte con la tuya”, y es eso, te vas a su mundo y lo traes hacia ti, y si ves que no enganchas pues intentas hacer tu propia dictadura y la gente empieza a levantar la cabeza, entonces echas a andar… y si quieres hacer un proyecto tienes que utilizar a la gente, pero no solo a los profesionales, das oportunidades, generas ilusión, esa ilusión que nos falta, estamos en crisis… encontrar un puesto de trabajo, decir a tus padres “que me han cogido en el Sol House, que voy a pinchar”…
¿Qué le recomendarías a un joven que quiere ser DJ?
-Yo recomendaría… al Gobierno (sonríe con cierta ironía) que se fijara que las profesiones más aspiracionales tienen que poder ser estudiadas y bien estudiadas dentro de un formato, no es cuestión de ir a una escuela de DJ y ponerte a pinchar, la profesión de DJ va mucho más allá. Y a los jóvenes les diría lo mismo, a los que les gusta la música que se metan a full con la música, cuando tienes un sueño tienes que perseguirlo, al margen de las normas que te impongan en casa, las que te impongan en la escuela, al final tienes que perseguir, aunque sea en tu poco tiempo, ese hobby, porque cuando lo consigues, en el fondo vas a ser mucho más feliz que las personas que, a lo mejor, han sacado el número uno de telecomunicaciones sin haberlo querido ser, sin tener auténtica vocación. Creo que tenemos que ser más humildes en la búsqueda, aunque ser DJ ahora es un profesión top, pero creo que hay muchísimos puestos de DJ que no son tan top, es decir que hay muchos espacios donde puedes desarrollar tu profesión y no tiene por qué estar asociado a eso que hemos dicho antes, que si Ibiza, que si Magaluf… y buscar una imagen más limpia, más blanca, porque al final esto es solo música, gente bailando música y un montón de gente escuchando música y disfrutando.