Glamour y acampada. Hace unas décadas, era difícil de pensar que estos dos conceptos pudieran tener alguna similitud y mucho menos fusionarse, pero lo han hecho y el resultado es el glamping, que no es otra cosa que acampar con suntuosidad en un entorno idílico. Un tipo de vacaciones que ofrecen algunos de los campings más exclusivos del país, como lo es Playa Montroig Camping Resort.
Este camping, en la Costa Dorada y que este año suma 60 temporadas, dispone de todos los elementos para la práctica del glamping, como unos lujosos bungalow de madera en forma de cabaña, un trozo de Mediterráneo, gran cantidad de árboles y unos servicios complementarios, como piscina con temperatura regulable, que le permiten poner el check a los elementos indispensables de un glamping:
Dormir en una atmósfera de lujo
No solo es que no haya que montar ninguna tienda, ni siquiera hay que preocuparse por nada, igual que en un hotel de 4 o 5 estrellas. Al fin y al cabo, la palabra glamping proviene de la fusión entre glamour y camping y proporciona la experiencia de dormir en sitios menos comunes como burbujas, casitas en los árboles o bungalow de lujo. En el caso de Playa Montroig Camping Resort, sus bungalows son cabañas de madera de pino Flandes que parecen sacadas de la Isla Bora Bora de la Polinesia Francesa. Están completamente equipados con cocina, baño y diferentes habitaciones, además de tener un amplio jardín con tumbonas y hamacas para descansar.
Ofrecer servicios complementarios al descanso excelso
Además de una casa de ensueño, los glampings han evolucionado y ahora brindan una serie de prestaciones adicionales para redondear la experiencia: piscinas climatizadas, jacuzzi, baño turco espacio wellness con profesionales de masaje, foodtrucks, actividades al aire libre como yoga, espectáculos de magia, baile o equilibrismo… Todo esto, además de 12 espacios gastronómicos, ofrece Playa Montroig Camping Resort, que es galardonado año tras año por los ‘Óscar’ del campismo debido a sus servicios.
Mimetizar con el entorno
Un establecimiento de estas características no se entiende sin estar integrado en el espacio natural, ya sea el bosque, la playa o ambas. La esencia del glamping es facilitar la acampada tradicional, condecorándola de todas las comodidades. Playa Montroig es uno de los que se ubican en la playa, con acceso directa a ella (tiene hasta 1 kilómetro de litoral marítimo). Sus más de 30 hectáreas interiores, pero, son como un gran jardín con 4.000 árboles, 2.000 flores y 1.200 palmeras, con todos los beneficios que aportan.
Ser una opción turística más ecológica
Muy vinculado con el anterior, como el concepto glamping no se entiende sin naturaleza, su propia condición los hace ser unos establecimientos turísticos responsables con el medio ambiente. En el caso de Playa Montroig, lo hace usando cloración salina para las piscinas (que no tiene productos químicos), imparte talleres de reciclaje, ha eliminado el uso de plásticos en los take away de los restaurantes y la iluminación exterior funciona con sensores fotoeléctricos.
Además, uno de los bungalows de este alojamiento, el Marine Ecolodge, está construido con dos contenedores marítimos ultraecológicos y su interior, con madera natural y elementos de mimbre, eliminando los elementos decorativos y funcionales de plástico. Estos depósitos marinos, provenientes de otros países, no suelen devolverse a su origen y convirtiéndolo en un bungalow de lujo, se evita que se convierta en otro residuo.