Combinando impresionantes paisajes, suntuosas instalaciones y una gran variedad de actividades perfectas para disfrutar en familia, Finolhu Baa Atoll Maldives es el lugar ideal para sentirse en otro mundo. Además, esta Semana Santa el resort recibirá la visita de Peter Pan.
Durante una semana, el eterno niño mágico que se niega a crecer estará acompañado por Campanilla, Tigrilla, el Capitán Garfio, el Sr. Smee, y el jefe de una tribu local para convertir Finolhu en la isla mágica de Nunca Jamás a través de numerosos juegos y actividades espectaculares diseñados para niños y no tan niños, que como Peter Pan se resisten a crecer.
El barco del Capitán Garfio zarpará desde el Oceaneers Kids Club el martes 12 de abril, dando el pistoletazo de salida a unos días cargados de actividades, como un taller para preparar trufas de chocolate, un picnic secreto en el banco de arena o un desfile mágico de moda en el Beach Club.
El fin de semana tendrán lugar las principales actividades de la Semana Santa con reminiscencias a Nunca Jamás. El sábado los huéspedes podrán disfrutar de unos cócteles en el Beach Club antes de degustar la suntuosa cena especial Peter Pan en el Beach Kitchen; y el domingo se celebrará la tradicional búsqueda de huevos de Pascua en el Palm Beach, seguido del almuerzo Nunca Jamás en el Beach Club. El día terminará con la “batalla” entre los Niños Perdidos.
La intensa semana de actividades llegará a su fin el lunes con el Concurso de dibujo de Campanilla, en el que los más pequeños podrán demostrar sus habilidades artísticas, y como colofón, el Family Pirate Fun Challenge, un evento para toda la familia en el Beach Club.
Si el cumpleaños de alguno de los niños coincide con la estancia en el hotel, el Capitán Fin y la sirena Lhu se ocuparán de conducirles a un mundo de fantasía aderezado con una decoración especial, regalos, juegos, comida, bebida y una espectacular tarta de cumpleaños.
Sin duda una oportunidad muy especial para combinar todo el encanto tropical de Finolhu con el mundo de fantasía de Peter Pan gracias a las sorpresas del Oceaneers Club.