La Reina es la figura que tradicionalmente simboliza el espíritu más solemne del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria y es, sin duda, uno de los grandes acontecimientos del año en la ciudad. Detrás de esa noche única están los esfuerzos de los diseñadores para elaborar sus cuidadas fantasías, la selección de las aspirantes para lucirlas en el escenario o la búsqueda de las empresas patrocinadoras, que finalmente son las que formalizan la candidatura a la corona con más historia de la fiesta.
En su regreso en 2022, después de un año de paréntesis por la pandemia global, la Gala vuelve a brillar. La elección de la Reina es un símbolo del retorno del Carnaval en todo su esplendor, una cita, además, que se retransmite cada año por televisión a través de Televisión Canaria y su web, y La 2 de Televisión Española; y en streaming en la
El parque Santa Catalina, en un escenario dedicado este año a la conservación de La Tierra, volverá a acoger esta gala en la que los votos del público y de diferentes jurados especialistas escogerán a la próxima Reina del Carnaval. Minerva Hernández, ganadora en 2020, cederá así su corona y cetro a la nueva Reina. Lo hará después de protagonizar el reinado más largo que se recuerda en las celebraciones: nada menos que dos años, en los que, como todas sus predecesoras, también ha asumido el papel de embajadora de las fiestas y representante en las acciones externas de promoción.
Actos, galas y concursos en la vuelta del Carnaval
Tras un año de parón la capital grancanaria ha vuelto a vestirse de Carnaval y llenarse de color para sus celebraciones más importantes. Hasta el próximo 20 de marzo, cuando el tradicional entierro de la sardina despida las fiestas, la capital acoge los actos, galas y concursos cumpliendo con todas las medidas sanitarias y con controles de aforo. De esta forma, a la Gala de la Reina la seguirá la gran Gala Drag Queen el viernes 18 de marzo, un evento que ha colocado a la ciudad como referencia de la trasgresión carnavalera, creatividad y libertad, todo subido a unas plataformas de infarto, música y muchísimo humo y ganas de bailar y divertirse.
Además, en verano la ciudad retomará el Carnaval para acoger las celebraciones en la calle, que se retrasan para adaptarse a la situación sanitaria.