Sofisticada y diversa, pero a la vez genuina y seductora, Palma invita a deleitarse con una buena copa de vino en locales de lo más cool a la vez que se disfruta de la auténtica gastronomía mallorquina.
Los vinos elaborados en Mallorca son cada vez más reconocidos por su calidad a nivel internacional, con dos denominaciones de origen: Binissalem y Pla de Llevant.
Palma invita a descubrir su patrimonio histórico-cultural recorriendo sus calles y patios abiertos, pero también a relajarse y dejarse cautivar por el magnetismo de la ciudad y su magia a través de sus sabores. Sabores que llegan de los productos autóctonos que convierten a la capital balear en un destino ideal para disfrutar de un millón de experiencias que conectan al visitante con el lugar, sus gentes, su gastronomía y su cultura.
Palma, ciudad mediterránea, es un destino que obsequia al visitante con una excelente gastronomía autóctona, en la que destacan especialmente sus vinos, únicos y con identidad propia que ya se han hecho un hueco entre los paladares más exigentes. De hecho, la isla mallorquina cuenta con dos regiones reconocidas con D.O., como son Binissalem y Pla de Llevant, premiados en concursos internacionales y, por supuesto, presentes también en la capital balear.
Un producto de excepción obtenido de variedades de viña autóctonas, como Mantonegro, Callet y Fogoneu para las tintas y Moll o Prensal Blanca para las blancas, aunque se han ido incorporando otras foráneas en los últimos años, principalmente francesas, al mismo tiempo que se han recuperado variedades tradicionales amenazadas, como la apreciadísima Malvasía.
Vamos a realizar un paseo por los algunos enclaves de Palma para los amantes del vino…
Paseando por el Carrer dels Apuntadors se llega a Wiening, un local con paredes de piedra vista y vigas de madera que recuerdan a una bodega tradicional. Un ambiente acogedor que invita a entrar y degustar una copa de vino acompañado de embutido y tapas típicas de la gastronomía de la de toda la vida.
En el centro de Palma, junto al Paseo del Borne, se encuentra un pequeño local típico mallorquín, en el que se ha mantenido la decoración clásica de origen. Esta bodega en la calle Sant Feliu ofrece una carta de vinos locales, nacionales e internacionales, un vino para cada ocasión que sirve de maridaje para tapas sencillas, de las de siempre, pero reinterpretadas con un toque contemporáneo. Vinos naturales y ecológicos en el corazón de Palma.
La experiencia y la innovación se unen en este local con más de 30 años de experiencia del centro de Palma. La carta de vinos es uno de los grandes valores del restaurante. Su amplia selección abarca vinos de todas las regiones de España, incluido variedades de Mallorca, pero también internacionales, desde Francia hasta Nueva Zelanda. Como plus, La Bodeguilla ofrece tapas y platos de tradición nacional, con ingredientes reconocibles y preparados al momento con una sencillez y técnica inigualables.
En este gastrobar de la calle San Feliu de Palma están representados 120 vinos nacionales. No hay carta de vinos, pero sus estanterías cuentan tanto con marcas de prestigio como de pequeños y prometedores productores, con un espacio especial dedicado a los vinos mallorquines. De la cocina de su bistro salen tapas elaboradas con producto fresco y de proximidad, caseras, ligeras y sanas para acompañar cualquier propuesta de su completa bodega.