El programa ‘Invocación’ que el Ballet Nacional de España representará los días 7 y 16 de mayo en Zaragoza y Pamplona incluye una de las escasas coreografías de escuela bolera creadas en los últimos años. En ‘Invocación bolera’, el director de la compañía pública de danza española, Rubén Olmo, actualiza la esencia de la escuela bolera tradicional, además de rendir un homenaje a los grandes maestros que marcaron la línea a seguir de este estilo: Mariemma, Ángel Pericet y Antonio el Bailarín.
Este estilo de danza española también es conocido como danzas goyescas porque el vestuario, con pantalones por la rodilla para los bailarines y faldas de vuelo y redecillas en el pelo para las bailarinas, recuerda el de los personajes populares representados por Goya en sus cuadros. Los bailes boleros proceden asimismo del siglo XVIII, cuando eran danzas populares que se bailaban en romerías y verbenas. Con el tiempo se fueron complicando e incorporando técnicas del ballet clásico hasta llegar a los teatros de toda Europa en el siglo XIX. Actualmente, la escuela bolera es una de las disciplinas más difíciles de la danza española por la rapidez de sus pasos y la necesidad de dominar también las castañuelas o palillos.
La música de ‘Invocación bolera’ es una composición contemporánea original para esta pieza encargada por el Ballet Nacional de España al joven compositor y director de orquesta sevillano Manuel Busto. La grabación que se podrá disfrutar en Zaragoza y Pamplona es la realizada por la Orquesta de Extremadura bajo la dirección del propio compositor. El vestuario fue diseñado por Pedro Moreno para la obra del Ballet Nacional de España ‘Fandango del Padre Soler’en 1988 y ha sido adaptado por el propio diseñador para esta obra.
La actuación del Ballet Nacional de España en el Palacio de Congresos de Zaragoza el 7 de mayo forma parte del ciclo ‘Música para Goya. De salones, tonadillas y fandango’. La Diputación de Zaragoza y el Gobierno de Aragón han programado diversos conciertos y espectáculos de danza inspirados en la época goyesca para conmemorar el 275 aniversario del nacimiento del pintor. La compañía pública no actuaba en Zaragoza desde 2006. La visita a Pamplona no se ha hecho esperar tanto. Aunque hace solo tres años desde la última vez que la compañía actuó en la capital navarra, las localidades para la única representación en Baluarte, el 16 de mayo, ya se han agotado.
De la escuela bolera al flamenco
‘Invocación bolera’ está incluida en el programa ‘Invocación’, una visión global de la danza española, incluyendo la mayor parte de sus estilos, que el Ballet Nacional de España estrenó en marzo de 2020 en la clausura del Festival de Jerez. Tras la pausa obligada por el confinamiento, este programa ha viajado a Albacete, Pozuelo de Alarcón (Madrid) y Terrassa (Barcelona). “Es un programa muy completo en el que se puede disfrutar de un flamenco lleno de vida y de fuerza en el escenario, un ballet de la más pura danza estilizada y una de las escasas coreografías recientes de escuela bolera”, afirma Rubén Olmo.
Completa la primera parte del espectáculo ‘Eterna Iberia’,de Antonio Najarro. Estrenada por el Ballet Nacional de España en 2019, se trata de una coreografía de danza estilizada que utiliza con brillantez elementos tradicionales de la danza española como la capa y el sombrero cordobés. La música fue compuesta originalmente por Manuel Moreno Buendía para el ballet ‘Eterna Castilla’, de Antonio Ruiz Soler, y editada posteriormente en forma de suite con el título ‘Celtiberia’.El sofisticado vestuario de Yaiza Pinillos representa la riqueza de nuestro territorio con la utilización de los colores azul, verde y granate para representar tres de nuestras riquezas: el mar, los olivos y el vino.
El programa ‘Invocación’ supone, además, la primera vez en su historia que la compañía pública incluye en su repertorio una coreografía de Mario Maya, bailaor, coreógrafo y maestro fallecido en 2008. Mario Maya es un referente en el mundo de la danza española por su genialidad y sensibilidad. Fue un pionero, autor de montajes arriesgados e innovadores y uno de los investigadores más incansables de nuestra época.
“Con De lo flamenco, Mario Maya refrescó en 1994 la forma de hacer y de sentir el flamenco en el escenario, sobre todo con una gran compañía de bailarines. Este montaje, estrenado por la Compañía Andaluza de Danza, actual Ballet Flamenco de Andalucía, de la que fue el primer director, marcó un antes y un después por su estilización, frescura y movimiento. Aun ahora sigue siendo innovador y totalmente diferente al resto”, asegura Rubén Olmo.
El montaje de ‘De lo flamenco’ que el Ballet Nacional de España representa añade al original de Mario Maya, Milagros Menjíbar y A. Rueda ‘Toná’ la coreografía ‘Los cinco toreros’ de Manolo Marín y dos obras nuevas creadas por dos colaboradoras habituales de Mario Maya:‘Romance del emplazado’, de Rafaela Carrasco, y ‘Taranto’, de Isabel Bayón. También han colaborado artistas que formaron parte del elenco original, desde el maestro repetidor Manuel Betanzos al músico Diego Carrasco. El vestuario es una réplica del original y ha sido pintado a mano por Juan Andrés Amaya. El cuadro flamenco del Ballet Nacional de España, acompañados por tres cantaores invitados, interpretará en directo la música compuesta por Diego Carrasco, Jesús Torres, Moraíto Chico y Los del Río.