Las redes sociales se han convertido en el espacio de los usuarios para compartir emociones y entretenerse. En este contexto, y con los niños en casa los últimos meses, se ha registrado un grave aumento de los casos de grooming.
Para Mercè Rovira, licenciada en Psicología, psicopedagoga y psicoanalista, “el peligro en las redes está siempre pero no hay que educar en el miedo, sino en la responsabilidad y el conocimiento para uno mismo”. Para Laura Sali Pérez, CEO de la agencia White Rabbit, “las redes no son peligrosas en sí, pero se convierten en los escenarios elegidos por groomers”.
El grooming, según la definición de los expertos, “son formas delictivas de acoso que implican a un adulto que se pone en contacto con un niño, niña o adolescente con el fin de ganarse poco a poco su confianza para luego involucrarle en una actividad sexual”. Con el auge del consumo de las redes sociales en los últimos meses y los niños en casa, se ha registrado un grave aumento de los casos de este tipo de acoso.
Mercè Rovira, licenciada en Psicología, psicopedagoga y psicoanalista, explica: “el peligro en las redes está siempre pero no hay que educar a los niños en el miedo, sino en la responsabilidad y el conocimiento para uno mismo, y esto incluye también a los padres”. Y agrega: “al igual que insistimos en que si un adulto se acerca a un niño y le ofrece un caramelo no hay que cogérselo, o no hay que irse con desconocidos, eso mismo hemos de transmitir en ese otro mundo, el de internet”.
A nivel global, más de mil millones de niños fueron afectados por el cierre de escuelas, debiendo adaptare a los nuevos usos y modos de la educación digital. De esta forma, se produjo una hiperconectividad que lleva, sin ninguna duda, a estar más vulnerables y cercanos a posibles casos de grooming o cyber acoso.
Para Laura Sali Pérez, CEO de la agencia White Rabbit y madre de dos niños pequeños, la peor pesadilla de los padres es no poder proteger a sus hijos: “las redes no son peligrosas en sí, pero se convierten en los escenarios elegidos por groomers.”
En los últimos años, grandes empresas como Movistar y entidades gubernamentales como la Policía Nacional, han desarrollado campañas de comunicación y concienciación para prevenir los ataques de grooming. “Las charlas educativas y campañas en grandes medios de comunicación y redes sociales son la clave para que tanto los padres como los niños tengan conocimiento de que esto existe y puede transformarse en un problema aún mayor”, añade Sali Pérez.
Educar a los niños y a los padres
Según los expertos, “las redes sociales no son ni buenas ni malas, son herramientas”. En el caso de YouTube y Tik Tok, las redes sociales del momento, se convierten en escenarios potencialmente peligrosos al no tener control sobre los groomers.
“Educar a un niño no es difícil, es laborioso. Y eso es lo que hay que retomar. Hay que jugar, estar con él, dedicarle tiempo y espacio y eso se va perdiendo. Hemos olvidado que el niño necesita crear, inventar, fantasear. Internet también permite desarrollar estas habilidades pero es necesario acompañarlos”, reafirma Mercè Rovira.
Las redes sociales se han convertido, durante el avance de la pandemia, en el punto de encuentro de los niños y adolescentes: tienen toda la información que quieren, se relacionan entre ellos, estudian y se divierten. Pero todavía se encuentran en una edad donde su personalidad está en construcción y puede verse interferida por el mal uso de las redes.
“La mayoría de los países todavía no cuentan con planes concretos para hacerle frente al grooming y en algunos casos ni siquiera está contemplado dentro de la propia legislación.”, afirma Laura Sali Pérez. “Por ello es importante concienciar a la sociedad y ayudar a viralizar medidas de prevención. Hay que explicarle a niños y padres que es necesario pensar antes de hacer clic, no confiar en desconocidos, no compartir vídeos o imágenes comprometidas, proteger la identidad digital, usar contraseñas complicadas y, sobre todo, denunciar el ciberacoso”, finaliza.
Uso comercial vs Uso Personal
Dentro de este contexto, hay que aprender a diferenciar los usos de las redes sociales, ya que el Grooming afecta, principalmente, a las cuentas personales de menores de edad. Para las empresas y emprendimientos, en cambio, las redes sociales son un factor importante para el reconocimiento.
Hoy en día si buscamos una empresa en Facebook o Instagram y no tiene perfil ya comenzamos a tener sospechas de ella. “La importancia de las redes sociales en las empresas crece cuanto más grande es el uso por parte de los usuarios: es uno de los canales mediante el cual tus clientes pueden encontrarte y puedes interactuar y contactar con ellos de manera rápida, efectiva y sencilla”, afirma Sali Pérez.
Las redes sociales actúan como el canal de venta de una empresa y representan el modo más directo de alcanzar al consumidor e interactuar con este. “La clave está, entonces, en entender que como empresas y para personal branding debemos utilizarlas diariamente, pero como padres debemos cuidar a nuestros hijos de su uso, acompañarlos, enseñarles y protegerlos”, finaliza la CEO de White Rabbit.