El maridaje es un “arte” mucho más complicado de lo que pudiera parecer a simple vista. Más allá de lo que nos guste o no, reconocer matices y aromas y saberlos combinar de modo que se potencien sabores y se complementen ingredientes, es una ardua tarea incluso para un experto. Daniel Martín, responsable de catas del Grupo Dihme, nos hace un repaso sobre cuáles son aquellas cervezas más apropiadas para acompañar una carne, un pescado, un postre o lo que se tercie.
A veces es difícil elegir un plato de la carta, pero si además nos encontramos con varios tipos de cerveza, la tarea se hace verdaderamente complicada. Para intentar hacer las cosas un poco más sencillas, hemos preparado una pequeña guía con ayuda de Daniel Martín, responsable de catas y consultor de expansión/operaciones del Grupo Dihme y gran conocedor del mundo de la cerveza, especialmente la artesana:
Carnes a la parrilla: “Como por ejemplo, presa ibérica. Para potenciar todos los matices gastronómicos de este plato necesitamos una cerveza con una cierta intensidad, pero no con demasiada acidez. En este caso, la ideal es La Sagra Criolla, una red ale con sabor afrutado y delicadas notas caramelizadas y tostadas, algo intensa a la vez que ligeramente ácida, que limpia el paladar y anima a seguir disfrutando de la experiencia”.
Pescados y moluscos: “Las cervezas de trigo son un comodín perfecto a la hora de maridar con platos de todo tipo. Específicamente, los sabores cítricos de la Blue Moon Belgian White encuentran un equilibrio perfecto con pescados y moluscos”.
Snacks: “Aquí la propuesta tiene sabor mexicano, como unos buenos nachos y una cerveza que la acompañe, por ejemplo la Mexican Style Lager de Blue Moon. La explosión de sabor de los nachos se ve potenciado por una cerveza de estilo Lager con un final refrescante en boca”.
Hamburguesas: “Las burgers de vacuno encuentran su pareja perfecta en una variedad más aromática de cerveza, en este caso la West Coast Style IPA, de Blue Moon. La carne a la plancha produce reacciones de Maillard _ la reacción de los azúcares y las proteínas llevados a altas temperaturas generan un sabor y unos aromas tostados muy atractivos para el paladar- que pueden recordar a las maltas, por lo que la burger y una excelente cerveza lupulada forman el matrimonio perfecto”.
Chocolate: “Sí, una cerveza en el postre, por ejemplo una exquisita Porter Ale como La Sagra Mulata, con sus aromas a café y chocolate. Sin duda, el contrapeso ideal para completar el viaje cervecero con una experiencia redonda”.
Pollo: “Un buen pollo frito combina a la perfección con una cerveza de trigo de toque afrutado. En este caso, la Blue Moon Mango Wheat es la mejor situada, elaborada con puré natural de mango, con la que se consigue una colosal fusión de sabores salados, dulces, ácidos y ligeramente amargos”.