Las Noches de Toro, fiel a su cita estival a pesar de las circunstancias tan especiales que caracterizan a este verano, vuelven de nuevo a escena con todas las garantías higiénico-sanitarias que la COVID 19 exige.
El Ayuntamiento de la localidad zamorana de Toro y la empresa Festivales con Encanto, responsables de la organización y gestión de Las Noches de Toro, han trabajado durante los últimos meses en la elaboración del programa de actividades de la edición 2020. Fruto de ese esfuerzo se ha conformado una oferta dirigida a todos los públicos con artistas de primer nivel y estilos variados.
Una edición diferente a las anteriores, condicionada por las necesarias medidas sanitarias que obligan a una importante reducción de aforo que garantice el preventivo distanciamiento social, además de la seguridad y la tranquilidad tanto de los espectadores como de los artistas presentes en Las Noches de Toro 2020. Con seriedad, trabajo y sensatez por parte de todos se conseguirá que esta nueva edición sea todo un éxito, sirviendo además para subir un peldaño más en la consolidación de este evento estival que retornó a la escena cultural toresana hace tres años.
Festival que se desarrollará del 31 de julio al 10 de agosto con reajustes en los espacios previsto en enero para la representación, sustituyéndolos por la Plaza de Toros, un recinto al aire libre, este año presenta un cartel formado por el folk de “Luar na lubre” (sábado 1 de agosto); el arte del flamenco de la mano de Rafael Amargo (viernes 31 de julio); la música más actual con Sofía Aller (domingo 9 de agosto) y Huecco (viernes 7 de agosto); la melancolía de Luís Pastor (sábado 8 de agosto) y los boleros de siempre con Tamara (domingo 2 de agosto); y para lo más pequeños, el musical “Frozen Trib” (lunes 10 de agosto) éxito en toda España y que presenta un elenco formado por 16 artistas.
El interés despertado durante estos tres años por Las Noches de Toro hace aún más importante y necesaria la celebración de este evento, aunque sea con limitaciones, pues ahora más que nunca se ha convertido en una actividad cultural necesaria que redunda en beneficio para el sector de la hostelería, tan dañado tras tantos meses de confinamiento, en el territorio de Toro y por supuesto, en toda la provincia de Zamora.
Venta de entradas en la Oficina de Turismo de Toro, en el Hotel Restaurante María de Molina, en la web www.lasnochesdetoro.com y en las taquillas del recinto dos horas antes del inicio de cada actuación.
VIVE UN VERANO INOLVIDABLE EN TORO
Una oferta cultural que es imprescindible completar con una visita pausada a la “muy noble, muy leal y muy antigua” ciudad de Toro y es que un paseo por sus calles nos regala la posibilidad de descubrir algunos de los monumentos más importantes de Castilla y León, como la Colegiata de Santa María la Mayor, testimonio plástico de la importancia alcanzada por la ciudad en el siglo XII y donde no podemos perdernos la magnífica portada de La Majestad; las iglesias de San Lorenzo el Real, San Salvador de los Caballeros, Santo Sepulcro y San Pedro de Olmo y la ermita de Nuestra Señora de la Vega, que hacen de Toro un importante núcleo del arte románico - mudéjar de la comunidad; el patrimonio civil con el Alcázar a la cabeza, los palacios de Valparaíso, de las Bolas, de la Nunciatura, de los Condes de Requena, de los Condes de Castrillo, de Bustamante, de los Marqueses de Alcañices y el de las Leyes y la Plaza de Toros, conjunto único de arquitectura tradicional del siglo XIX o los numerosos monasterios y conventos como el Real Monasterio de Sancti Spíritus, el de Santa Sofía, el Real Monasterio de Santa Clara y los conventos de San José, de la Purísima Concepción y San Cayetano y el de PP. Mercedarios.
Otro de los reclamos que ofrece este interesante destino son sus vinos, ensalzados por su aportación calórica por los peregrinos que se dirigían a Compostela y de los que se cuenta que fueron los primeros en llegar al continente americano aprovechándose de su cuerpo y especial calidad que garantizaban una larga duración.
Dejando de lado leyendas que no sabemos ciertas, la realidad es que los vinos toresanos son en la actualidad mucho más refinados, habiendo captado el interés de los amantes del vino de diferentes lugares del mundo. Un largo camino que ha llevado muchos siglos y que ha impregnado a la ciudad de una tradición vitivinícola que hoy podemos admirar en algunas de las bodegas subterráneas que horadan el subsuelo toresano, como la del Ayuntamiento, la de la Cámara Agraria y la del Palacio de los Condes de Requena y por supuesto, en las más modernas que nos descubren los secretos de su elaboración, nos dan la oportunidad de degustarlos y que en muchos casos forman parte de la D.O. Toro y de la Ruta del Vino de Toro.
Y para acompañar un vino que mejor que disfrutar de una sabrosa gastronomía. Y esto es lo que Toro ofrece también; excelentes quesos elaborados y curados respetando la tradición y exquisitos embutidos como el chorizo de Zamora, el lomo embuchado y fresco ibérico, el salchichón, la morcilla, la panceta o la cecina. Sin olvidarnos de los frutos de temporada y hortalizas frescas que nacen de la fértil vega del Duero que junto con el cereal y los cultivos de regadío hacen de Toro y si Alfoz la despensa de la provincia de Zamora. No puede faltar en la mesa elaboraciones típicas como las sopas de ajo, el rabo de toro estofado al vino tinto, el bacalao a la tranca y deliciosos postres con el arroz con leche y castañas.
Para conocer mejor el fascinante mundo del queso y del vino de es necesario visitar el Museo del Queso de Toro y el Museo del Vino situado en el vecino pueblo de Morales de Toro.
Este atípico y extraño verano que nos invita a probar otro tipo de experiencias estivales, pero no menos sugerentes, se presenta como una buena oportunidad para viajar a Toro del 31 de julio al 10 de agosto y disfrutar de una interesante oferta cultural y de su patrimonio, su gastronomía y sus vinos.