El 7 de mayo, líderes de los comités de Asuntos Exteriores del Congreso de Estados Unidos enviaron una carta a 55 países, instándolos a apoyar la participación de Taiwán en la Organización Mundial de la Salud (OMS), dieron a conocer los medios locales dicho día.
En un momento en el que el mundo busca combatir la propagación del COVID-19, “nunca ha sido más importante garantizar que todos los países den prioridad a la salud y la seguridad global por encima de la política”, señala la misiva.
La carta también destacó las fortalezas de Taiwán en el campo de la salud pública, señalando que la nación logró contener con éxito la propagación del COVID-19, registrando solo 440 casos hasta el 7 de mayo, y ha donado más de 10 millones de mascarillas quirúrgicas a sus socios internacionales.
Si bien, de 2009 a 2016, Taiwán fue invitada a participar en las reuniones anuales de la Asamblea Mundial de la Salud (AMS), el órgano rector de la OMS, desde entonces se ha excluido de las reuniones, debido al descontento de Pekín tras la elección de la presidenta Tsai Ing-wen en 2016 en Taiwán, apunta la carta.
Al priorizar los intereses políticos de China, la OMS ha socavado la capacidad de Taiwán de contribuir a la respuesta internacional frente al COVID-19 y también ha puesto en peligro la salud y la seguridad de los 23 millones de habitantes de la isla, según la carta.
“Las enfermedades no conocen fronteras. Instamos a su Gobierno a que se una a nosotros para abordar el problema apremiante de la inclusión de Taiwan en las organizaciones mundiales de salud y seguridad”, indica la misiva.
Presionar por la invitación de Taiwán a la sesión virtual de la AMS del 18 al 19 de mayo es “el lugar correcto para comenzar”, expresa la carta.
La carta a los 55 países fue firmada por Jim Risch, presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Senado de EE. UU., y Robert Menéndez, otro miembro del mismo, así como por Eliot Engel, presidente del comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, y Michael McCaul, otro miembro de la misma.
El 10 de mayo, el Ministerio de Relaciones Exteriores (MOFA, siglas en inglés) publicó una declaración agradeciendo a los miembros del Congreso estadounidense por sus “acciones concretas en apoyo a la participación internacional de Taiwán”.