Un esfuerzo de cooperación técnica entre Taiwán y Dinamarca ha producido un dispositivo de prueba para el COVID-19 que muestra los resultados en tan solo 12 minutos, pero aún está en la etapa de ensayo clínico, anunció el Ministerio de Ciencia y Tecnología el 8 de abril.
El dispositivo, denominado ViroTrack, fue desarrollado por la empresa innovadora conjunta BluSense Diagnostics, con fondos de Taiwán, indicó el ministerio al presentar el kit de prueba en una rueda de prensa.
Con solo una gota de sangre del paciente, ViroTrack puede producir un resultado en 12 minutos que indica si la persona es portadora del virus o se ha recuperado de una infección por COVID-19, señaló el ministerio.
En un ensayo clínico inicial la semana pasada se analizaron 15 muestras de sangre en el Hospital Hvidovre de Dinamarca, y el rendimiento del dispositivo fue de un 90 por ciento de precisión en términos de sensibilidad y especificidad, según BluSense Diagnostics.
La semana próxima se realizarán más ensayos clínicos en hospitales italianos, con el objetivo de obtener la certificación en la Unión Europea en mayo y lanzar el dispositivo en el mercado de Taiwán en junio, señaló la compañía.
ViroTrack es portátil y fácil de usar, lo que lo hace adecuado para la detección de COVID-19 en lugares de entrada, indicó el viceministro de Ciencia y Tecnología, Shieh Dar-bin, durante la rueda de prensa, agregando que espera que este se pueda suministrar a los países que tienen capacidad limitada de realizar pruebas.